Justificado calificativo de “Sabio” para José Cecilio del Valle

ZV
/
24 de septiembre de 2021
/
12:07 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
Justificado calificativo de “Sabio” para José Cecilio del Valle

Por: José Rolando Sarmiento Rosales

Mineralogía, botánica, zoología, física y química, además de la Jurisprudencia, filosofía, sociología, economía, literatura y periodismo, entre otras materias del conocimiento humano, eran manejadas por nuestro ilustre compatriota José Cecilio del Valle, “que desde temprana edad se consagró al servicio de la ciencia. En pleno siglo diecinueve, cuando ya las especialidades se iban imponiendo como norma de la vida, el bisoño líder ejercía un rectorado intelectual en América Latina. Sus trabajos en diversos campos científicos han causado con justicia el asombro de nuestros contemporáneos. Cuanta profundidad y amplitud se advierte en sus conceptos. Cuantos hechos histórico-sociales logró predecir, gracias a la penetración de su genio. Su mirada taladraba el futuro y su voz dejó latiendo el eco sobre el temblor de sus edades”. De tal manera lo describe Eliseo Pérez Cadalso, en la segunda edición de 1968, en su libro Valle Apóstol de América.

“En las ciencias naturales elaboró numerosos trabajos, que son por regla general el resultado de sus personales investigaciones. Su gabinete de labor, que se conserva intacto merced a la filial solicitud de sus descendientes, consta de nutrido y valiosos elementos. En mineralogía escribió varios estudios, siendo digno de especial mención el que se refiere a los minerales del suelo americano. La botánica y la zoología constituyeron para él, motivo de seria atención científica. Sobre “vegetales” redactó algunos artículos, haciendo clasificaciones y divisiones según los usos. Así los llama: medicinales, fabriles, venenosos, alimenticios, tintóreos, etc. Durante sus períodos parlamentarios hizo hincapié en la necesidad de aclimatar en Centroamérica muchas plantas útiles. Hablando de las numerosísimas especies de la América, dice: “Recordémoslo con gozo puro. La América es la que ha dilatado más los límites de la botánica. Los sabios más grandes son los que han dejado la Europa para venir a la América a observar las riquezas vegetales de este inagotable continente.

Terminado el drama de la anexión a México, José Cecilio del Valle regresó en septiembre de 1823. El período previo a la salida fue de observación sobre la realidad moral y material de México. Hizo nutridas glosas, penetró fenómenos sociales, inquirió en la geografía, en la historia y en todos los terrenos que provocaban su afán de trazar las leyes del conocimiento. Oigámosle ahora relatar esta parte de su viaje: Deseaba hacerlo con todo el provecho posible, y busque con este objeto los instrumentos más útiles. Pero no pude conseguir más que un barómetro y termómetros de la escala Fahrenheit”. Sin tener otros auxilios para llenar el afán de quien deseaba trabajar, me propuse: 1. Tomar la altura sobre el nivel de mar de los lugares principales del tránsito; formar tablas, una de alturas barométricas. 2. Observar la opinión de los pueblos -que la tuviesen- especialmente sobre la independencia de Guatemala, que era mi asunto predilecto. 3. Llevar un diario de mi viaje expresando las distancias de los pueblos, según la voz o juicio común, manifestando sus temperaturas y apuntando lo más notable que hubiese en cada uno de ellos.

Matemáticas, estadística, geografía e historia. Valle era filósofo y matemático también; realizó trabajos estupendos de estadística y economía política, influyendo decisivamente en el pensamiento de su tiempo. Bajo el nombre de “Las Matemáticas en sus Relaciones con la Prosperidad de los Estados”, pronunció con fecha 16 de mayo de 1831, y en ocasión de abrirse un curso de matemáticas bajo auspicio de la Sociedad Económica de Guatemala, una brillantísima conferencia a la cual asistieron numerosas personas del mundo político-científico. Cuando nadie en estas latitudes hablaba de la estadística, Valle la defendía ardientemente, considerándola como “el mapa grande de los gobiernos, la carta donde el hombre público fija los ojos para hacer aquellas combinaciones felices que sirven de base a los sistemas benéficos de administración”.

Saldría sobrando decir que un hombre de tan ancha ejecutoria, llamado por ello el “Sabio”, poseía extensos conocimientos de geografía e historia. Es autor de un “Estudio geográfico” y de un “Prospecto de la historia de Guatemala”, donde Valle traza los fundamentos y la orientación que deben tomar los historiadores para realizar una verdadera obra. Su vida pública ha dado suficientes testimonios de amor a la independencia, de celo, de desprendimiento y de patriotismo, sus escritos descuben un entendimiento cultivado por excelentes estudios, una lectura escogida y una ilustración profunda, particularmente en aquellos ramos que más pueden contribuir a la prosperidad y a la ilustración del país a que han hecho tan grandes servicios. Solo nos queda espacio para mencionar de sus trabajos sobre educación, “sosteniendo Valle que el mayor bien de un pueblo es la ilustración, preconizando la educación pública subvencionada por el Estado. La primera necesidad de una nación es la educación de sus hijos”.

[email protected]

Más de Columnistas
Lo Más Visto