25 años de sacerdocio del obispo: José Antonio Canales

ZV
/
17 de octubre de 2021
/
12:05 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
25 años de sacerdocio del obispo: José Antonio Canales

Ordenación de obispo en la catedral de S.P.S.

Autor: Luis Alonso Gómez Oyuela
Email: [email protected]

DANLÍ, El Paraíso. Dios tiene diferentes formar de llamar a sus profetas y ministros, pero no todos los llamados tienen la misma reacción que tuvo el profeta Samuel al responder. “Habla Señor porque tu siervo oye”. La disposición de Isaías al escuchar la voz de Dios en visión que decía: ¿a quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: “Heme aquí, envíame a mí”. Eran tiempos difíciles cuando Dios envió a sus profetas y lo son ahora. El ministerio cristiano no surge de las emociones, sino de la vocación, entrega y sacrificio.

El obispo José Antonio Canales celebró 25 años de vida sacerdotal el pasado 12 del presente con una misa de acción de gracias en la catedral Inmaculada Concepción de esta ciudad. Ocasión propicia para conocer a grandes rasgos la historia de su vocación sacerdotal.

Acto de ordenación en 1996 en San Pedro Sula.

LT/ ¿Cómo surgió su vocación por el sacerdocio? “Precisamente después de haber terminado mi carrera en la universidad, en la USAC de San Pedro Sula donde estudié Ciencias Jurídicas y Sociales, me gradué de abogado en 1984. En ese tiempo, era líder de la Pastoral Juvenil, muy joven para entonces. El compromiso que tenía con la juventud; mis hermanos jóvenes me inspiro para comprometerme en la evangelización de la iglesia para siempre. En ese momento no renunciaba a idea de formar una familia, llegar al matrimonio, tener una familia. Pero estaba fuertemente en mí el hecho de servir en la iglesia. Pasados unos años pensé en una entrega total, la idea la fui madurando con un director espiritual, hasta que llegó el momento que el siguiente paso era ir al Seminario Mayor”.

LT/ ¿Tuvo dudas? “Nunca me empeciné en la idea de ser sacerdote, lo llevé con mucha tranquilidad y calma. Recuerdo que, en todos esos años de teología, filosofía y los dos años de una práctica pastoral, en todo ese tiempo lleve las cosas con tranquilidad, siempre pensando en que, si el Señor quería que fuese sacerdote, durante ese tiempo lo estaría confirmando, si el Señor me daba señales que no era lo mío, entonces tomaría otro rumbo. Surgieron dudas y vino a mi mente de formar una familia. Siempre traté de escuchar la voz de Dios”.

Recibe el abrazo del obispo Ángel Garachana Pérez.

LT/ ¿Qué sintió el día de la ordenación? “El día de la ordenación, sentí lo que siente un joven cuando va a contraer matrimonio, está enamorado de la muchacha, piensa que es la mujer de su vida, pero siempre hay un margen de duda, es natural, es humano; yo creo que los seres humanos siempre tenemos dudas de nuestras decisiones. Creo que el único que no tiene dudas es Dios porque Él tiene la sabiduría perfecta. El día de mi ordenación estaba feliz, aunque en el fondo había una duda si realmente ese era el camino que me haría una persona feliz”.

LT/ ¿Dónde ofició la primera misa? “Mi primera misa la oficié en la iglesia de mi barrio, en mi pueblo natal La Lima. Justamente donde había sido monaguillo y donde recibí la primera comunión, con mi vecindario y toda la gente de la parroquia “Nuestra Señora de Guadalupe”. Era muy conocido en la comunidad”.

El día de la ordenación del ahora obispo de la Diócesis de Danlí.

LT/. ¿Los primeros años en el ejercicio sacerdotal? “Dicen que el primer amor nunca se olvida. Yo llevo muy clavada en mi mente a la primera parroquia “Nuestra Señora de Suyapa”, en aquel tiempo comprendía 28 colonias del sector de las maquilas de Choloma, la colonia López, Arellano, ocho aldeas de la cordillera El Merendón y once campos bananeros, para un recién ordenado el trabajo era motivador. Luego tuve el privilegio de estudiar en el extranjero una especialidad en teología. Fui a la Universidad Pontificia de México, la única universidad autorizada por el Vaticano para dar títulos. En San Pedro Sula fue mi segundo destino en la parroquia “Nuestra Señora de Guadalupe”, que por espacio 34 años había sido dirigida por misioneros españoles, yo fui el primer párroco hondureño de la “Guadalupe de San Pedro Sula. Posteriormente llegue a la parroquia catedral”

LT/ ¿Obispo de Danlí? “Escuché comentarios, pero nunca lo tomé en serio. Yo era tan feliz en mi vida de párroco que nunca me entusiasmó la idea de ser obispo porque yo lo que más he disfrutado es la cercanía con la gente. Cuando me llegó la carta firmada por el papa Francisco, me indicaba que me preparara porque iba para la nueva Diócesis de Danlí que comprendía 17 de los 19 municipios del departamento de El Paraíso. Fue impactante porque era tierra extraña para mí. No volví a ver atrás, lo mío era esto y aquí estoy contento”.

Con feligreses en la parroquia catedral de S.P.S.

LT/ ¿Una nueva diócesis? “Es un desafío porque está todo por hacerse en cuanto a la estructura. Como iglesia todo es diferente. Me encontré con una iglesia rica porque es una de las más antiguas del país. Los templos reflejan su historia. Me vine a encontrar un pueblo cristiano que ya estaba avanzado 300 años atrás. No vine a iniciar nada nuevo en el sentido de iglesia que camina”.

LT/ ¿Retos del presente? “Los principales retos ha sido llevar el evangelio a la gente de tal forma que lo puedan entender y comprender. En el norte tenía gente de todas partes, entonces como adaptar las actuaciones. Ese ha sido el reto más grande, los pastores tenemos que preocuparnos de qué manera estamos llegando a la gente”.

Día de la presentación de tesis en la Universidad Pontificia de México.

LT/ ¿Sobre la situación del país? “Justamente hoy (13 de octubre) la Conferencia Episcopal ha dado a conocer un pronunciamiento sobre el comportamiento que debemos tener los hondureños de cara al proceso electoral. Estamos haciendo conciencia en la gente, que dejemos a un lado los viejos criterios de votar por un color y ciegamente. Votar en plancha, es negar, renunciar a las capacidades que Dios me ha dado para examinar quiénes son los candidatos. Votar en plancha es todo lo contario a la inteligencia”.

LT/ ¿Qué significan 25 años en el sacerdocio? “Todavía me falta mucho para entregarme completamente como debe ser al servicio del Señor, como ser humano. Todavía no estoy satisfecho de mi trabajo en estos 25 años. Le doy gracias al Señor por los momentos que creo haberlo hecho bien”.

José Antonio Canales, obispo de la Diócesis de Danlí.
Visita la línea férrea del tren “La bestia”, junto a la cruz de un hondureño.
Más de Dominicales
Lo Más Visto