Pederastia y crímenes sexuales de la Iglesia Católica

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18 de octubre de 2021
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12:05 am
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Pederastia y crímenes sexuales de la Iglesia Católica

Por: Otto Martín Wolf

Primero que todo debo aclarar que esto no es un ataque contra ningún Dios, la fé de nadie o los creyentes, tampoco contra la Iglesia Católica.

Acaba de ser publicado un nuevo escándalo referente a violaciones de menores por parte de sacerdotes católicos.

Esta vez la bomba estalló en Francia donde se han contabilizado más de 216 mil, advirtiendo que pueden llegar a ser 330 mil (trescientos treinta mil) los casos de niños abusados por sacerdotes.

La Iglesia Católica francesa pidió perdón rápidamente, reconociendo la culpabilidad en los casos presentados por una Comisión Investigadora.

Será suficiente pedir perdón? Ayudará a todos estos niños abusados? Le quitará de su mente y de su vida el trauma causado por los supuestos agentes de un Dios?

Y, algo igual de importante, qué está haciendo la Iglesia Católica para tratar de evitar que eso suceda en el futuro, no solo en Francia sino en otros países?

Seguirá la Iglesia Católica con la práctica de solo reubicar a esos degenerados, para que sigan “ejerciendo” en otras localidades?

Cuál es el criterio de selección de las personas que se convierten en sacerdotes? Obviamente no les han hecho una real prueba de estabilidad emocional en lo referente al sexo o quienes se las hacen son tolerantes e, inclusive, cómplices.

Simples matemáticas: si se trata de 300 mil casos y pensamos que cada diez fueron cometidos por una misma persona, tenemos 30 mil sacerdotes violadores, pedofílicos o sea, casi todos los sacerdotes que ejercen en Francia… casi todos!

Qué hubiera sucedido si esos delitos hubieran sido cometidos por pastores o sacerotes de otra iglesia, no tan poderosa como la católica.

Es más, si se tratara de una empresa comercial, digamos un fabricante de zapatos -y los datos fueran así de terribles- con todas seguridad la gente los hubiera aborrecido y condenado, las autoridades hubieran intervenido con mayor rapidez y eficiencia.

Accionistas y gerentes, todo el personal administrativo estaría tras las rejas, posiblemente porque los fabricantes de zapatos no “trabajan para un Dios”.

En Honduras -como en casi todo el mundo- se han producido casos a los cuales se les ha dado poco perfil, notoriamente uno en Danlí donde el delincuente solo fue cambiado de parroquia, precisamente por un alto funcionario de la iglesia que después fue removido de su cargo por ataques y prácticas homosexuales que incluyeron el uso de dinero de la iglesia para comprar un apartamento para su amante masculino.

Me pregunto: cómo pueden cada domingo en las acostumbradas homilías hablar de moral, dar recomendaciones y hasta censurar la conducta de los demás si la viga en el ojo de ellos es enorme?

Y algo más intrigante, por qué los miembros de la Iglesia Católica aceptan esa conducta, por qué no piden cuentas?

Ellos son la iglesia, no los curas pederastras.

Y aún más, por qué cuando escribo sobre estos temas tan terribles y verdaderos, convierten la denuncia y la crítica en lo que no es: no se trata de un ataque a un Dios, es una denuncia de los delincuentes sexuales que se esconden detrás de un hábito y una cruz para abusar y dañar a niños inocentes.

Cuándo oiremos una homilía tocando ese tema?

Hasta cuándo los altos dirigentes se harán los desentendidos?

Y hasta cuándo la feligresía lo permitirá?

Por qué la mayor parte de las veces toman partido a favor de los delincuentes y no de las víctimas?

No deberían exigir que se limpie la casa de su Dios?

El Papa Francisco ofreció allá por 2015 que “Todos los responsables serán llevados ante la justicia”, nada de eso parece haber ocurrido en Honduras, será que aquí existe una autoridad más alta que la del mismo Papa?

Pederastra: Abusador de menores.

ottomartinwolf.com
[email protected]

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