Erika sopló las velitas del pastel acompañada de
sus compañeros de la Escuela Americana.
Cumplir años es una buena excusa para reunir a todos los amigos y hacer una gran fiesta, y eso fue precisamente lo que hizo Erika Corleto el viernes recién pasado.
El lugar elegido para la cita especial fue Azotea, en Mall La Galería de Tegucigalpa, allí invitó a sus amigos, compañeros de la promoción de 1995 de la Escuela Americana, y compañeros de trabajo de las distintas empresas donde ha laborado, quienes no dudaron en acompañarla en la celebración de su 45 cumpleaños.
Fue una fiesta que Erika disfrutó al máximo junto a personas queridas, que esa noche le patentizaron sus muestras de cariño, uno de ellos fue Eduardo Barahona -presidente de la clase- quien realizó un emotivo brindis en su honor, deseándole dicha y que continúe cosechando éxitos en su vida. El DJ Binbo fue el encargado de animar la reunión.
