*** Hace pocos días sufrimos en la clasificación para el mundial de Qatar 2022, otra derrota, esta vez frente a Panamá y ayer con Costa Rica y si no me equivoco estamos en los últimos lugares de la clasificación de Concacaf. Qué sucedió con Honduras que junto a la “Ticos” eran los grandes equipos de las últimas tres décadas que hemos visto. Las pocas veces después de España 82 que hemos ido a una copa mundo, hemos fracasado.
Dónde está el espíritu y el patriotismo que le vimos a la selección de 1982 que nos honró con su rendimiento en ese certamen que se llevó a cabo en España.
Dónde están las grandes figuras del fútbol hondureño como un Majoncho Sosa, un Clive Garbut, “Chula” Gómez, un Zacarías Arzú, un Julio “El Brujo” Martínez, un “Coneja” Cardona y otros nombres que podrían estar en esa lista.
Dónde está el entusiasmo que sentíamos por el fútbol hondureño y que se ha venido desvaneciendo con el paso de los años.
Por qué cada vez que contratamos entrenadores extranjeros, sin menospreciar su capacidad, no se puede lograr lo que se hizo con “Chelato” Uclés.
Qué pasos se deben tomar en organizar ligas infantiles como lo hicieron “Chelato” Uclés, José Cerrato y otros amantes del fútbol catracho.
En dónde está la falla, en la Federación, en la Fenafuth o en el espíritu de los jugadores. Nunca olvidemos que los futbolistas que brillaban en nuestras canchas no eran profesionales y sudaban la camiseta y daban todo por su país.
Nada me gustaría más que en el epílogo de mi vida, ver renacer al fútbol hondureño el cual aun llevo en mi sangre y en mi corazón
