Por: José Luis Moncada Rodríguez
[email protected]
Indiscutible que ha pesado el 28 de noviembre, los ciudadanos hondureños entraron en una urgencia nacional, normalmente son personales y particulares, pero sumadas se convirtieron en nacionales, y el objeto fue sacar a los cachurecos del poder, doce años de pesadilla tenían que llegar a su fin, eso nos lleva a tener una mujer en la Presidencia de la República, Xiomara Castro de Zelaya, esposa del expresidente Manuel Zelaya mejor conocido como “Mel”, con eso el Partido Libertad y Refundación Libre en corto plazo llega al poder y de manera contundente, más del 50%, es decir, que aunque se hubiera aprobado la segunda vuelta no hubiera tenido problema alguno.
La urgencia nacional solo inicia, los retos que tiene la nueva presidenta son sustantivos y amerita acciones rápidas, eficientes y bien pensadas y por lo mismo de análisis y estrategia por talento humano capaz y con experiencia, en el campo económico que es el motor de la operación se ocupa una reformulación del Presupuesto General de la República, que conlleve a mi criterio a fortalecer la institucionalidad pública que podría o debería llevar a un gobierno más compacto y eficiente, y entrando de lleno a desarrollar la tecnología digital que conlleva a un mejor y eficiente servicio a la ciudadanía y por ende trasparente, equitativo y que genera combatir corrupción pública que tanto daño nos ha hecho; dicho lo anterior priorizar las partidas de presupuesto en temas de salud, educación, infraestructura, agroalimentaria, Pymes, turismo, ambiente; sin descuidar la seguridad y defensa de la ciudadanía la cual tiene presupuesto relevante pero amerita revisión, mejor enfoque y cierto grado de trasparencia de su uso.
Hay temas que no podrán esperar y uno de ellos es crear la confianza y credibilidad internacional que atraiga inversión de forma rápida y necesaria, que como todos sabemos es imperativa por la generación de empleo que es la manera de combatir la pobreza y sus consecuencias, hay que dar seguridad jurídica y condiciones claras para esta tarea de atracción de inversión, considero que en infraestructura estamos bien, en mano de obra hay cierto grado de desarrollo, aunque hay brechas que cubrir, lo que no afecta competitividad es el precio y calidad de la energía, esta materia ocupa de cirugía mayor y dirección con serio compromiso de soluciones, ya venimos arrastrando esta problemática por años a expensas de intereses particulares, válidos pero no necesariamente positivos o gananciosos para la mayoría, se han dado muchas acciones pero ninguna ha hecho avanzar sobre una Ley General de la Industria Eléctrica aprobada en el 2014, difícil entender tantos años y no implementarse, esto es de urgencia nacional presidenta.
Las políticas económicas, monetaria, fiscal y de desarrollo van juntas, las decisiones que se tomen de una tienen efecto en las otras, por lo mismo deben estar integradas y ser parte de una planificación clara y sobre todo coordinada para que tenga efectos visibles y de desarrollo; los que se van a mi criterio no tuvieron esa visión o estructura que en forma ordenada nos generara un buen manejo, no solo es hablar de indicadores macroeconómicos, los cuales tienen una función y beneficios pero hay que potenciarlos y llevarlos a ser eficientes en otras áreas de la economía, por lo mismo es imperativo un gabinete económico fuerte, sólido profesionalmente y con experiencia, que mande mensaje a los agentes de la economía como ser la banca nacional y extranjera y que por ende motive el apetito de estos en sus diferentes operaciones y bajo una supervisión moderna y de carácter a ser aliado de desarrollo sin perder la obligación de proteger al usuario, ahorrante y los socios.
Un tema que entiendo la presidenta conoce, es la agricultura, aquí hay que ordenar algunos aspectos y potenciar lo que ya hacemos bien para consumó nacional y llevar a mercados internacionales; diversificar, tecnificar, comercializar de manera más eficiente, con políticas de financiamiento público y privado viables, salvaguardando la soberanía alimentaria y nutricional.
Definir aspectos claves que acompaña la política pública de desarrollo, como ser las Alianzas Públicas Privadas, las ZEDE, los fondos de inversión, fideicomisos y demás será también de urgencia nacional, las tareas no son fáciles pero hay expectativas positivas de que se generan cambios o transformaciones a beneficio de la mayoría de catrachos.
