Por: David Salomón Amador
MBA – Sector Bancario y Financiero
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Las elecciones recién concluidas de nuestro país Honduras, vinieron a demostrar muchas cosas, una de ellas es que los llamados millennials fueron los encargados de crear un contrapeso de los llamados votos duros de los partidos políticos, fueron ellos quienes hicieron que la balanza se diera para la alianza, sumado a votos de personas que decidieron dejar a un lado el tradicionalismo familiar, y de esos incluyo a partidarios del partido gobernante; que vieron como doce años el país se vio sumergido en un incremento de la pobreza; en que las leyes no se cumplen para las mayorías, que las políticas fiscales no eran las adecuadas, sumado a los problemas endémicos del país, falta de servicios de salud, falta de mejoras en el sistema educativo, y sobre todo la falta al combate a la corrupción, esos indicadores son importantes para un país, y esos son en extremo valorados por instituciones internacionales como el FMI, BM y consecuentemente la MCC, la Cuenta del Milenio, para el año 2010 cuando se dio el primer cambio de gobierno estos eran los indicadores.
Fuente: https://www.mcc.gov/who-we-select/scorecard/fy-2010/HN
Se puede observar claramente que el control de la corrupción fue del 44%, el manejo de las leyes del 50% y la política fiscal del 44%; esta medición corresponde al año 2010, estas calificaciones de la Cuenta del Milenio son realizadas en el año posterior al período evaluado.
Fuente: https://www.mcc.gov/who-we-select/scorecard/fy-2014/HN. Para el año 2014, los indicadores son más complejos en sus evaluaciones, política fiscal 46%; política comercial 50%; derechos de tierra 23%; libertad de información 27%; apertura de negocios 50%; efectividad del gobierno 27%; derecho a leyes 4%; control de la corrupción 15%. Estos indicadores pueden verse no superaron la calificación por lo tanto en el año 2014 no se tuvo acceso a recursos de la Cuenta del Milenio, y cada calificación fue ponderada o por el FMI, IFC o Banco Mundial, lo que garantiza más claridad en los porcentajes evaluados.
Fuente: https://www.mcc.gov/who-we-select/scorecard/fy-2020/HN. Estos indicadores para el año 2020 se muestran con mayor preocupación son control de la corrupción del 37%; efectividad de gobierno 30%; derecho a leyes 15%; apertura de negocios 15%; y aparecen algunos otros.
Vemos como tiene una importancia significativa al medir la Cuenta del Milenio estos indicadores, y básicamente es el reflejo de los aspectos que han incidido en la votación de este 2021; el tratar de incluir campañas de socialismo, miedo, lo que provocó fue un efecto contrario, y en eso los jóvenes centennials y millennials no cayeron, todo lo contrario las redes sociales se inundaron de comentarios como el siguiente: “Vivimos en la Suiza de Centroamérica y tenemos el 72% de pobreza”; “la educación pública de Honduras supera a la de Cuba donde el 95% de la población tiene título universitario”; “sí seremos Venezuela porque hay venezolanos ya viviendo en Honduras”; y podría continuar, lo cierto es que quien haya sido el estratega político del partido de gobierno, no pudo reaccionar o no tuvo la prevención de identificar la forma de pensar y creer de esta generación de jóvenes, admirable la valentía y sobre todo la entereza de expresar desde las redes sociales sus ideas y su amor patriótico.
Y el voto femenino, las mujeres hondureñas, seres que generación tras generación nos demuestran que sin ellas este país no podría salir adelante; son las que cada mañana se levantan a ser seres transformadores de nuestras vidas, los que hemos sido hijos y ahora esposos podremos valorar mucho más que sin ellas en nuestras vida no somos nada, existe un famoso adagio popular “Quién manda en la casa”; lo cierto es que el voto de las mujeres fue evidente, se sintieron insultadas y hasta defraudadas por la manera y forma en como ciertos interlocutores se expresaron de la dama que hoy es según proyecciones la primera mujer con investidura de presidente constitucional de la República de Honduras; será un hecho que marcará la historia del país, y ojalá pueda rodearse de personas capaces, hábiles en lo personal como profesional, personal que sumen y no resten, pero que por todas las cosas, mantenga esa característica de las mujeres, la ecuanimidad, la sabiduría y el buscar siempre el beneficio común.
Viene una jornada difícil, dura para las nuevas autoridades, pero soy de los que creo que las dificultades son las mejores oportunidades para salir adelante; y de igual forma hay que hacer valer el designio del pueblo hondureño, no más corrupción, no más autoritarismo, sí a la inversión, sí a la mejora educativa y de salud, Honduras se lo merece, los hondureños nos lo merecemos.
