Honduras, ejemplo de práctica ambulatoria y prevención anticovid

Tegucigalpa. Un mayor aumento de casos y la muerte de pacientes de COVID-19 se previno desde marzo de 2020, al promover el uso obligatorio de la mascarilla en la población, así como la implementación de brigadas médicas, centros de triaje y vacunación masiva en tiempo récord, entre otras medidas adoptadas por el gobierno del Presidente Juan Orlando Hernández.

Ante la amenaza de la variante Ómicron del coronavirus, el mandatario exhortó este jueves a los hondureños a celebrar la Navidad con prevención.

“Los tratamientos Maíz y Catracho, uso temprano de mascarilla, triajes y una vacunación masiva en tiempo récord, nos permite un control de la pandemia; Ómicron pone al mundo en una situación complicada, celebremos la Navidad cuidando a nuestras familias”, manifestó Hernández, en su cuenta de Twitter.

LA PRIMERA MEDIDA

A propuesta del Poder Ejecutivo, el Congreso Nacional aprobó el 21 de mayo de 2020 la ley que establece el uso obligatorio de la mascarilla.

Pero desde antes de enviar esa iniciativa de ley al Legislativo, el 6 de abril de 2020, el Ejecutivo estableció como obligatorio el uso de la mascarilla y pidió a la ciudadanía adoptar también las demás medidas de bioseguridad, como el uso de gel a base de alcohol y el distanciamiento social, para evitar la propagación del virus.

“Pido a todos los ciudadanos que ayudemos a lograr el 100 por ciento del cumplimiento de esta nueva política que comienza mañana, el uso de mascarillas es obligatorio, no es opcional”, manifestó el Presidente Hernández, en cadena nacional de radio y televisión, el 6 de abril de 2020.

En esa fecha, Honduras solo registraba 298 casos y 22 muertos por COVID-19.

Pero el gobierno impulsó el uso de la mascarilla desde inicios de la pandemia, cuando los primeros dos casos del virus se confirmaron el 11 de marzo de 2020, logrando contener la propagación acelerada de la enfermedad y previniendo el colapso de los hospitales.

RECOMENDACIÓN DE OMS

Las brigadas contra el COVID-19 llevaron tratamiento oportuno casa por casa y evitaron que los contagiados fallecieran.

Mientras, en Honduras ya desde marzo de 2020 el gobierno promovía el uso de la mascarilla, fue hasta el 5 de junio de ese año que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó a la población mundial adoptar esa medida de prevención.

Para entonces, en Honduras ya estaba vigente la ley que establece el uso obligatorio de la mascarilla.
Honduras fue así el primer país de América Latina, y tres meses antes de la OMS, en establecer el uso obligatorio de la mascarilla, cuando había menos de 300 casos de COVID-19 en todo el territorio nacional.

Esta serie de medidas permitió salvar miles de vidas, evitando cientos de miles de casos enfermos y haciendo posible mantener los servicios básicos de la economía nacional, incluso durante los peores momentos de la pandemia.

En ese sentido, Hernández, señaló que el uso de los tapabocas “puede prevenir la dispersión de las microgotas, potencialmente contagiadas”.

En la actualidad, Honduras sigue pidiendo el uso obligatorio de la mascarilla en lugares públicos.

LETALIDAD ES DE 2.74

Hasta la fecha, Honduras registra una tasa de letalidad por COVID-19 de 2.74, una de las cifras más bajas de todo el continente americano.

Asimismo, se lleva un proceso acelerado de vacunación, que ya supera los 9 millones de dosis aplicadas.
Ambos elementos, el uso de mascarilla y la vacunación, han contribuido a la disminución de casos, de personas hospitalizadas y de muertes.

“Desde hace unos días hablé sobre la importancia de usar mascarillas en todo momento, expliqué lo que ha sido reconocido por muchos países a nivel mundial: el uso de las mascarillas puede salvar vidas”, enfatizó el mandatario el 6 de abril de 2020.

Hernández abogó por convertir a Honduras en “el primer país en América donde el uso de la mascarilla sea universal” e indicó que su empleo, incluso en casa, “puede prevenir la dispersión de las microgotas, potencialmente contagiadas”.

El jefe de Estado recomendó la elaboración de mascarillas de tela en casa y en microempresas, y promovió la confección exclusiva de mascarillas e insumos médicos de protección en la industria de la maquila.
Fue así que en colaboración con las Fuerzas Armadas y la Asociación de Maquiladores de Honduras se elaboraron y entregaron más de 10 millones de mascarillas a la población como medida de protección.

MENCIÓN INTERNACIONAL

Al uso obligatorio de la mascarilla y las demás medidas preventivas se sumaron otras acciones del gobierno, como la apertura de centros de triaje y el desplazamiento de brigadas médicas para detectar casos de COVID-19 y entregar los tratamientos “Maíz y Catracho” a los afectados.

Al respecto, un artículo de RealClear Investigations, organización estadounidense dedicada al periodismo de investigación, destacó este 21 de diciembre que Honduras es uno de los países de Latinoamérica que ha sido un gran ejemplo para contrarrestar los casos de COVID-19, por haber implementado la práctica ambulatoria y con tratamientos menos costosos.

Honduras, India, Perú y México son los países que encontraron resultados más prometedores y los tratamientos que aplicaron eran seguros, añade.

El artículo cita al reconocido médico hondureño, Fernando Valerio, quien subraya que los centros de triaje y las brigadas médicas fueron un acierto para contrarrestar la incidencia del coronavirus.

La publicación señala que Valerio es un pionero en la hospitalización de pacientes con COVID-19 y que en su momento instó al gobierno a ir casa por casa para detectar casos y dar medicamentos de forma gratuita.
“Y la tasa de mortalidad en Honduras disminuyó notablemente, aproximadamente la mitad de Estados Unidos en aquel entonces”, puntualiza la publicación.

DATOS
* Casos de COVID-19: 378.994
* Muertos por el virus: 10.429
* Recuperados: 123.783
* Hospitalizados: 71
* Vacunas aplicadas: Más de 9 millones de dosis.