Los médicos reiteraron el llamado a los padres de familia, para evitar que los niños sigan siendo afectados por el uso de pólvora.
Un menor procedente de Nacaome, Valle, ingresó a la Fundación para el Niño Quemado (Fundaniquem), con lesiones en su mano por la explosión de un mortero mal manipulado.
La doctora de Fundaniquem, Judith Andino, dijo que el menor, Denis Chávez, de seis años, llegó con una lesión en su mano derecha, ya que, según el relato de la madre, se encontró dos morteros y tras encender uno, este le explotó en la mano.
“El menor puede perder uno de los dedos de su mano tras la explosión, en horas de la tarde, el menor será intervenido y sabremos más claro qué pasará”, indicó.
Actualmente, 15 menores permanecen hospitalizados en Fundaniquem, de los cuales dos niños resultaron afectados por la explosión de morteros, y los demás por quemaduras de agua o aceite caliente. (DS)
