Los Chiefs de Kansas City probablemente sintieron que se veían en un espejo el domingo cuando enfrentaron a Cincinnati.
Tenían enfrente a un joven y estelar quarterback que trituró su defensa para 446 yardas y cuatro touchdowns. Igualmente, observaron un joven y dinámico receptor que capturó 11 balones para 266 yardas y tres anotaciones. Y un talentoso joven corredor que hizo lo suficiente por tierra para frustrar a la defensa.