*** Pasando revista a la situación mundial lo que salta a la vista es la poca cantidad de funcionarios públicos que han sido verdaderos líderes y que han puesto interés especial en hacer lo mejor para su patria en vez de pasar su tiempo buscando enriquecerse y reelegirse a como dé lugar para seguir gozando de los beneficios que sacan de sus cargos públicos, sin importarles gran cosa como le va a la población que los eligió creyendo que le servirían a la patria y a sus ciudadanos.
Traigo a colación la falta de líderes dedicados, que lo dieron todo por la patria que los vio nacer y que honraron el puesto que ocuparon. Un notable ejemplo de un gran estadista y un héroe nacional es Winston Churchill, el gran primer ministro que tuvo Inglaterra durante muchos años y que salvó a su país durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Alemania, en manos de Adolfo Hitler, estuvo a punto de invadir y apoderase de la nación británica.
Hace dos días, el 24 de enero del 2022, se cumplieron 57 años desde que a los 91 años de edad, falleció Churchill, después de haberle dado tanto a la patria que lo vio nacer y al mundo democrático al que él, con Roosevelt y Truman, salvaron al derrotar a los nazis cuando marchaban en camino de apoderarse del mundo.
Qué daría yo por tener en estos tiempos tan inciertos y peligrosos a un líder que le llegue a los talones de Winston, el ciudadano honrado, que no se valió de su puesto para enriquecerse, el ciudadano inglés que la prestigiosa Revista TIME en diciembre de 1999, al llegar al 31 de diciembre de 1999, acertadamente calificó a Churchill como El Gran Hombre del Siglo 20.
Ya quisiera ver a Winston Churchill encarar a Vladimir Putin y unir a los países democráticos para juntos salvar a Ucrania y así evitar que caiga en manos del gobierno ruso y también para frenar decididamente a los numerosos tiranos y dictadores que hay en día tienen pretensiones globales.
O para unir a las naciones europeas que en vez de juntarse se están separando, y Winston también podría dar clases de honestidad a los gobernantes corruptos, pues el nunca tocó las arcas del estado o del pueblo para llenar sus bolsillos. ¿Acaso algún día aparecerá otro Winston?
