Familia de Keyla denuncia persecución y estigmatización
La titular de la Secretaría de Derechos Humanos (SEDH), Natalie Roque Sandoval, le da el recibimiento a Norma Rodríguez, madre de Keyla.
La Secretaría de Derechos Humanos anunció que dará prioridad al acompañamiento del caso de la estudiante universitaria de enfermería, Keyla Martínez, quien murió en febrero de 2021 bajo la responsabilidad del Estado de Honduras.
Tras recibir en el aeropuerto de la ciudad de San Pedro Sula a Norma Rodríguez, madre de la malograda joven, Keyla Martínez, la titular de la Secretaría de Derechos Humanos (SEDH), Natalie Roque Sandoval, anunció que con instrucciones de la presidenta Xiomara Castro: “Será una prioridad el acompañamiento del caso de la joven enfermera Keyla Martínez, quien murió bajo la responsabilidad del Estado en la posta policial de La Esperanza, Intibucá, el 7 de febrero del año 2021”.
Durante el encuentro, Roque Sandoval, expresó a la madre de Keyla, que, desde su gestión, asumirá el caso, ya que es imputable responsabilidad del Estado de Honduras, por lo que es el deber de la SEDH acompañarlos en su exigencia del derecho a la verdad, a la justicia, la reparación de las víctimas y que los hechos no se repitan.
Asimismo, informó que también se concentrarán en otros casos emblemáticos de muertes violentas de mujeres, que se mantienen en impunidad y en cumplimiento de sus derechos enmarcados en la Política Pública y Plan Nacional de Acción de Derechos Humanos (PPPNADH), que establece en uno de las obligaciones del Estado de “prevenir, combatir, erradicar todo tipo de violencia contra la mujer, y, promover un cambio en la cultura generadora de violencia contra las mujeres”.
La SEDH también preside la Comisión Interinstitucional de Seguimiento a las Investigaciones de Muertes Violentas de Mujeres y los Femicidios, espacio de acompañamiento al fortalecimiento de las investigaciones a través de la coordinación y articulación de políticas, estrategias, programas, planes, reformas de Ley y proyectos para prevenir, atender, sancionar y erradicar la muerte violenta de mujeres y los femicidios y demás tipos de violencia contra las mujeres, adolescentes y niñas.
La muerte de Keyla Martínez, joven de 26 años de edad y de profesión enfermera, se produjo tras ser detenida en un operativo policial montado en La Esperanza, Intibucá, trasladada a la posta de la localidad.
El caso se encuentra en proceso de judicialización en contra de un miembro de la Policía Nacional de Honduras, quien fue requerido por la justicia.
La familia de la joven ha denunciado persecución y estigmatización, a la vez que reclaman que se amplíe el procesamiento a otros actores supuestamente implicados en el crimen.
