Jubal Valerio Hernández
La captura del expresidente Juan Orlando Hernández a petición del Departamento de Justicia de los Estados Unidos de Norteamérica para que comparezca ante las cortes de justicia de la ciudad de Nueva York, a responder por los graves cargos que se le imputan, en la comisión de varios graves delitos, ha quedado ahora en manos del Poder Judicial de Honduras (juez natural), quien deberá tomar la decisión de si procede o no la extradición del ciudadano Hernández Alvarado. La opinión pública, está en ascuas.
Son muchas las opiniones que se han vertido por varios profesionales del Derecho de nuestro país, para explicar cuáles son los pasos que deben seguirse, desde el punto de vista legal, hasta llegar al momento de emitir una resolución -como parece que así va a ocurrir- que apruebe la extradición de JOH a los Estados Unidos.
Pero la pregunta, ¿y ahora qué sigue?, aunque también tiene connotaciones jurídicas al ser respondida, va más allá, se trata de que la Cancillería hondureña, le de curso a las otras 16 solicitudes de extradición que le han sido presentadas por el Departamento de Justicia de los EEUU, a las cuales todavía no se les ha dado el trámite correspondiente. Esto, de acuerdo a lo manifestado por varias personalidades de renombre en los medios de comunicación.
Si eso ocurriese, se estaría propinando un duro golpe a la cúpula que dirige el crimen organizado en el alto nivel gubernamental, de conformidad a la lista que las autoridades norteamericanas han dado a conocer. De paso, se estaría enviando un mensaje contundente a los funcionarios, y a los empresarios, que han hecho de la corrupción su modus vivendi y desistan de su actuar delictivo.
También, por supuesto, los organismos operadores de justicia y de control del accionar gubernamental, deben entrar en acción. Si sus titulares no se sienten capaces de cumplir con sus obligaciones, deben renunciar o ser removidos.
Ahora bien, si de lo que se trata es de depurar la conciencia de la población de los malos hábitos y las tentaciones, es menester arrancar, cuanto antes, con un intenso proceso de recuperación de los valores éticos morales y patrióticos, esto solo puede lograrse, a través del sistema educativo, tienen la palabra el nuevo Ministro de Educación, las gobernaciones políticas departamentales y las corporaciones municipales de todo el país, de igual manera, las fuerzas vivas de cada comunidad, para involucrarse, de forma efectiva y articulada, en esta gran cruzada patriótica. Eso es lo que sigue! Sembremos para cosechar!
