Hombres armados mataron el domingo al menos a 34 personas, entre ellas dos militares, en varios ataques realizados en el noroeste de Nigeria, declararon el martes las autoridades locales.
“Dos militares figuran entre las 34 personas muertas” en los ataques realizados por “atacantes no identificados” en cuatro localidades de la zona de Kaura, declaró el comisario de seguridad interior del Estado de Kaduna, Samuel Aruwan.
“Las agencias de seguridad reportaron al gobierno estatal de Kaduna que tras operaciones de minuciosa búsqueda, se confirmó la muerte de 34 personas”, añadió.
Una persona es dada por desaparecida y otras siete resultaron heridas en esos ataques ocurridos en las localidades de Tsonje, Agban, Katanga y Kadargo, precisó Aruwan en Facebook.
Más de 200 casas y 30 comercios fueron incendiados durante los actos de violencia, según las autoridades.
“El gobierno trabaja sin pausa con las fuerzas de seguridad para restablecer la normalidad en la región”, aseguró Aruwan.
Estos actos de violencia son los últimos de una serie, imputados a bandas fuertemente armadas presentes en el noroeste y el centro, donde saquean, secuestran y matan residentes.
El mismo domingo, 16 personas fueron asesinadas en otros ataques en el vecino Estado de Zamfara.
A inicios de enero, más de 200 personas perdieron la vida en circunstancias similares en el Estado de Zamfara.
La violencia criminal en los Estados del noroeste y centro de Nigeria es solo uno de los desafíos de las autoridades, que luchan también contra una insurrección yihadista desde hace 12 años en el noreste y contra las tensiones separatistas en el sureste.
A comienzos de marzo hombres armados mataron al menos a 57 miembros de un grupo local de autodefensa en enfrentamientos en el Estado de Kebbi (noroeste), lo que fue condenado por el presidente Muhammadu Buhari como un “brutal asesinato”.
El ex general, de 79 años, es muy criticado por su incapacidad para detener la inseguridfad generalizada en el país.
Residentes locales han creado unidades improvisadas, conocidas como Yansakai, para proteger pueblos de las ofensivas de los bandidos, aunque varios Estados los prohibieron tras ser acusados de crímenes extrajudiciiales.
Esos grupos se enfrentan con frecuencia a las bandas criminales
Expertos en seguridad han advertido que las bandas, movidas por intereses financieros, están forjando alianzas con yihadistas del noreste de Nigeria.
Las fuerzas de seguridad aseguran que bombardean y atacan los escondites en la selva de los delincuentes y que las autoridades el año pasado cortaron telecomunicaciones en algunos Estados del noroeste para impedir la comunicación entre ellos.
Las bandas criminales nigerianas han sido noticia internacional cuando han atacado escuelas y secuestrado estudiantes para pedir rescates a las comunidades.
La violencia de las bandas armadas tiene su origen en las luchas intercomunitarias por territorio y recursos entre granjeros y criadores nómadas de ganado. AFP
