El mundo del fútbol le dio una despedida por todo lo alto a Freddy Eusebio Rincón. El hijo de Buenaventura, ídolo de varios clubes y no solo en el fútbol colombiano, estuvo acompañado de familiares, amigos, excompañeros y decenas de hinchas que llegaron a darle el último adiós en el estadio Pascual Guerrero. El ídolo ahora es leyenda.
Antes de tomar rumbo al Cementerio Metropolitano del Sur, último destino del cuerpo de Freddy, sobre el estadio Pascual Guerrero cayó un fuerte aguacero. Pero ni la inclemente lluvia impidió que las decenas de acompañantes, especialmente hinchas de los ‘Diablos Rojos’, dejaran de corear: «Muchas gracias, Freddy, muchas gracias», al que se sumaron Sebastián y Freddy Stiven, hijos del fallecido exjugador. Un momento emotivo.
