Hablemos de arte: ANTES QUE LA NECESITE

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28 de abril de 2022
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12:01 am
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Hablemos de arte: ANTES QUE LA NECESITE

Keyla Morel

Por lo general, cuando estoy dando clases de arte virtualmente, sucede que se termina el tiempo designado para la sesión interactiva y los estudiantes todavía no han terminado sus ejercicios, entonces, como yo sé por donde se han quedado con la elaboración de este, dedico los últimos minutos a advertirles lo que van a tener que afrontar y a explicarles cómo pueden solucionar cualquier problema que se les presente. Me he dado cuenta de que siempre están aquellos estudiantes súper atentos que siguen instrucciones y toman nota, y también están aquellos que como decimos popularmente “los consejos les entran por un oído para salir por el otro”, cuando veo los resultados finales para mí es sumamente fácil diferenciar a los unos de los otros.

No puedo dejar de notar paralelismos en el arte con la vida cotidiana y real; siempre hay una persona o lectura que nos aconseja de antemano para no cometer errores, y si no estamos atentos o nos encontramos concentrados en otras actividades, probablemente perderemos valiosas palabras que nos harían más fácil el camino. Ahora que soy madre, entiendo frases como “es por tu bien”, “no es ganas de molestarte, es para que te vaya mejor en la vida”, etc. He entendido algo que me ha servido mucho: Las mejores decisiones en mi vida serán las bien pensadas y tomadas antes de necesitarlas… se los voy a tratar de explicar: como todos, soy un ser lleno de imperfecciones y orientada a la toma de malas decisiones que obedecen a instintos básicos como el de no incomodarme o el de darle gusto a mis sentidos y sentimientos más inmediatos. Todos venimos de fábrica con esa naturaleza; pero pronto comprendí que no es lo más fácil y cómodo lo que me hace ser mejor, si no más bien lo contrario… hay personas que ya han transitado el camino de su vida y saben lo que nos espera a los que venimos atrás, y al igual que yo con mis estudiantes, se toman el tiempo de advertirnos de los desafíos y obstáculos que tendremos y sus posibles soluciones. Esas personas pueden se nuestros padres, seres amados, autores de libros o escrituras como la misma Biblia o textos llenos de sabiduría.

Entendí también que no solo hay que escuchar y poner atención; hay que estar de acuerdo y tomar decisiones en el mismo momento en que uno comprende que lo que nos están aconsejando es correcto. Esta segunda parte creo que es la que más cuesta; si no, analicen el caso típico de la jovencita a la que todos le dicen que sea cuidadosa con cierto tipo de hombres y ella siempre asienta con la cabeza, pero a la hora de la hora ¿adivinen con qué tipo de galán acaba?… ¿es que no se le advirtió?, ¿es que no escuchó?, ¿es que no entendió? Les voy a decir qué pasó: Es que no decidió. Cuando vemos noticias de personas que terminan mal por robar, por ser infieles o por no dominar el temperamento, no necesitamos que después de la noticia haya una “sección explicativa” de por qué no hay que hacer esas cosas, realmente lo sabemos. Les diré que, si la gente al escuchar consejo tomara inmediatamente decisiones de vida y comportamiento en base a ellos, los cónyuges no caerían en infidelidad porque antes de casarse lo habrían decidido, el funcionario no sería corrupto porque antes de tomar un trabajo ya habría decidido ser íntegro, los estudiantes de arte lograrían mejores resultados, pues aplicarían los consejos de alguien que ya se golpeó haciendo lo que no se debe hacer… etc., etc. El mejor momento para tomar decisiones y determinaciones en la vida, es antes que el camino nos exija ver de qué estamos hechos.

 

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