El canciller Eduardo Reina, presentó los ejes, en la ONU, que contienen las líneas de acción que el gobierno va a implementar a través del FHIS, donde se están creando condiciones dignas y humanas para la población.
Por ejemplo, se trabaja la distribución equitativa de viviendas, disminuyendo el déficit habitacional alrededor de 1 millón 400 mil hogares que tiene problemas de vivienda, equivalente al 61.9%.
Los ejes de trabajo contentivos en la Nueva Agenda son:
1.- Financiar la Nueva Agenda Urbana para fortalecer y descentralizar los fondos y que las municipalidades implementen, de manera directa y expedita, su accionar.
2.- La Promoción de proyectos de servicios básicos en las comunidades más pobres del país, mediante la ejecución de obras sociales, alcantarillado, sanitarios, energía, agua potable, mejoramiento a la estructura educativa, sanitaria y viviendas, que garantice el desarrollo local sostenible de las comunidades intervenidas.
3.- Transparencia y participación en la toma de decisiones de las comunidades integrantes; significa brindar confianza y promover la política de transparencia y rendición de cuentas, que permita la creación de confianza en los ciudadanos.
“Tenemos el compromiso moral, social y político de garantizar la reducción de la pobreza mediante el fortalecimiento de las áreas de educación, salud, vivienda social, inversión en obras de infraestructura y desarrollo social, por medio del empoderamiento de las comunidades para la instalación de proyectos sostenibles, respetando las creencias, opiniones e ideología de los pueblos beneficiarios, sin distinción alguna”, opinó.
El embajador Reina recordó a los asistentes de tan importante evento, que Honduras atraviesa por uno de los momentos más críticos en la historia, acentuado por los eventos catastróficos que azotaron gran parte del territorio hondureño, de forma devastadora.
“Durante el año 2020, Honduras no luchó únicamente contra la pandemia COVID-19, sino que, adicionalmente, fuimos víctimas de dos huracanes denominados ETA y IOTA, que agravó la situación precaria de nuestro país, dejando consecuencias nefastas, con pérdidas que oscilan alrededor de los 50 mil millones de dólares, según datos de la CEPAL, sufriendo así un angustioso ascenso en la pobreza de hasta 10.7 puntos porcentuales, cambiando desde un 59,3 que se encontraba anteriormente, a un 70 que se encuentra en la actualidad”, manifestó el embajador Reina.
