Jorge Díaz, de Ajuterique, visitó Comayagua con su esposa y sus dos hijos, a bordo de una motocicleta.
Cada día, las autoridades de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) realizan operativos para evitar que ocurran tragedias en las carreteras de Comayagua, donde circulan a diario miles de motocicletas.
Basta con permanecer de pie en una vía unos cuantos minutos, para darse cuenta que es casi imposible no detectar a dos, tres y hasta cuatro pasajeros a bordo de una sola motocicleta, quienes ponen en peligro su vida y la de los menores que transportan.
Jorge Díaz y su esposa Norma Carías se transportan a diario en una “moto”, en la que también suben a sus dos hijos. Según explicaron a LA TRIBUNA, el precio de los pasajes del bus se ha incrementado, por lo que tiene que arriesgarse a viajar todos en el vehículo de dos ruedas.
Según contó Norma, no les quedó de otra que viajar con sus hijos en la motocicleta, ya que tenían que llevarlos a un centro asistencial en Comayagua, desde la comunidad de Ajuterique.
MENORES Y “BOLOS”
En dicha localidad y también en Lejamaní hay muchos menores de edad conduciendo motocicletas y en el barrio La Independencia ni siquiera el casco utilizan.
Por si fuera poco, los fines de semana muchos irresponsables conducen a toda velocidad, bajo los efectos del alcohol o la marihuana.
A esas imprudencias se suma el hecho de que muchos de los motociclistas se conducen en contravía en el centro de la ciudad, pues ahora que hay cientos de “rapiditos exprés”, lo que provoca accidentes y colisiones hasta con heridos y muertos.
Pobladores de Comayagua hicieron un llamado a las autoridades de la DNVT, para que tomen las medidas necesarias y así se eviten tragedias. (SZM)
