La Presidenta Xiomara Castro se comprometió ayer públicamente, a que la comunidad LGTBI porten su tarjeta de identidad con fotografía y nombre, según su orientación sexual.
El anuncio lo hizo, en San Pedro Sula, de manera virtual, como parte de los compromisos del Estado de Honduras, derivados de la condena de parte de la Corte Internacional de Derechos humanos (CIDH), por el crimen de Vicky Hernández, una mujer trans, defensora de los derechos humanos y trabajadora sexual, asesinada en el marco del golpe de Estado de 2009.
Durante la ceremonia, donde se honró la muerte de Hernández, la gobernante solicitó públicamente el perdón por este “vil crimen”, que fue elevado ante la CIDH por la organización Catrachas, bajo el argumento de discriminación en el acceso a la justicia basado en su orientación sexual.
La mandataria dijo que su gobierno se compromete, como medidas de reparación, a publicar la sentencia de la Corte Interamericana y su resumen.
Igualmente, a promover y continuar las investigaciones sobre el homicidio de Hernández y otorgar una beca de estudios a Argelia Yojana Reyes Ríos, sobrina de la asesinada trabajadora sexual.
Además, el Estado realizará un documental sobre la situación de discriminación y violencia que experimentan las mujeres trans en Honduras y creará la beca educativa “Vicky Hernández” para mujeres trans.
Un plan de capacitación permanente para agentes de los cuerpos de seguridad del Estado será puesto en práctica.
CÉDULA CON DATOS DE GÉNERO
El Estado adoptará “un procedimiento para el reconocimiento de la identidad de género, que permita a las personas adecuar sus datos de identidad en los documentos de identidad y en los registros públicos de conformidad con su identidad de género”, expresó la mandataria.
Como resultado de la sentencia se hará un protocolo de investigación y administración de justicia durante los procesos penales para casos de personas LGTBI víctimas de violencia.
El Estado “diseñará un sistema de recopilación de datos y cifras vinculadas a los casos de violencia contra las personas LGBTI y se pagarán las cantidades fijadas en la sentencia por concepto de indemnizaciones, costas y gastos”.
“Durante doce años vivimos una pesadilla en Honduras como resultado de la improvisación en el poder de una cleptocracia voraz que permitió y propició la infiltración del narcotráfico en las estructuras del Estado que produjo corrupción en gran escala.
Impunidad y represión como nunca se había experimentado”, expresó la mandataria.
“La verdad debe servir como ejemplo a las futuras generaciones, los hechos ocurridos y derivados del golpe de Estado en Honduras no deben volver a repetirse, los cientos de muertos, asesinatos y violaciones constantes, la noche oscura del golpe y de la dictadura no deben volver a nuestra Patria”, concluyó.
