Después de ser objeto de un atentado criminal por estructuras dedicadas a la extorsión, los operarios de la empresa de transporte interurbano “Junqueños”, decidieron cerrar hasta segunda orden.
El miércoles pasado, dos sujetos a bordo de una motocicleta dispararon contra una unidad de transporte de esa empresa, hecho violento acaecido en el barrio Concepción, de Comayagüela, supuestamente por exigencias del mal llamado “impuesto de guerra” que cobran “maras” y pandillas.
Por segundo día consecutivo, la oficina de la empresa hoy seguía cerrada, luego que uno de sus autobuses fue tiroteado, poniendo en riesgo la vida de varios pasajeros.
Hoy las instalaciones de la empresa de transporte estaban vigiladas por elementos policiales, quienes resguardan la entrada. Pese a ese dispositivo de seguridad, los dueños de “Junqueños” no se animaron a seguir operando, por temor a sufrir un nuevo atentado criminal.
Transportes “Junqueños”, cubre la ruta de Tegucigalpa-Santa Bárbara y viceversa. Tras el atentado aún no hay ninguna versión oficial de parte de los propietarios. Solo se supo, a través de unos empleados, que la empresa permanecerá cerrada hasta nueva orden.
Uno de los conductores que no se identificó dijo que la extorsión es permanente. El motorista indicó que solo les queda encomendarse a Dios cada vez que se suben a una de las unidades.
Por su parte, autoridades policiales informaron que siguen las investigaciones y que se están tomando las medidas para la lucha contra ese delito y dar con el paradero de los responsables de los atentados contra el rubro transporte. (JGZ)
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