Por: Blanca Moreno (*)
Más que risa, causa congoja, el exceso de ignorancia exhibido en los desfiles del 15 de septiembre. Funcionarios, estudiantes y maestros deben reflexionar por la falta de cultura y de buenas costumbres.
En mi niñez me impresionó saber el concepto de bayunco. Mi padre me explicó que es un término ofensivo para referirse a una persona penca, sin educación.
Lo evoqué, con la reaparición de Allan Valeriano (Gazú Beatbox), quien maneja el arte de los “cómics” agregados a respuestas disparatadas. No es nada nuevo. Hace 13 años Gazú entró a la carpa de información de una aspirante a diputada y le preguntó por dónde entró a Honduras, Cristóbal Colón?
-Por Amapala. Noooo…
Una laguna de Gracias a Dios… corrigió la muchacha. Nooo…
-Cuánto mide Honduras?
172 kilómetros cuadrados. Nooo…
Esta vez, entrevistó a una linda palillona, cuya materia preferida es Español.
-De dónde es Miguel de Cervantes y Saavedra?
Ella cándidamente dijo que leyó su libro, pero que no recuerda el nombre.
Tampoco sabe dónde está enterrado Francisco Morazán, ni cuánta es la extensión de nuestro territorio.
Rinaldi Scalicci, otro comunicador, les “tomaba el pelo” a políticos y transeúntes, viajaba por el interior del país para hacer su programa “El pinchazo”.
-Cuántos heterosexuales trabajan en la alcaldía de Amapala?
-Ninguno, contestó el jefe edilicio y agregó picarescamente que en todo el pueblo habían como cuatro. Cuando entendieron la broma y el significado de la palabra, el “pinchador” fue declarado “non grato” en la isla del Pacífico.
En estos días se han puesto de moda los que dicen disparates. “Le cambiamos el nombre a los desfiles patrios, porque patria se deriva de patriarcado”, declaró un “deschavetado” de Educación.
El actual ministro de la Secretaría de Planificación Estratégica, a quien Marvin Ponce llamó “vaca intelectual” en un foro televisivo, tuiteó: “Un tema simpático: resulta que, según estudios, la inflación es un factor que impulsa el crecimiento económico de los países. El problema, es que la inflación afecta duramente a los ricos, por lo que mantener una inflación baja es obsesión de las elites, que no soportan perder”.
En agosto que Google informó (y luego quitó el dato) de la devaluación del lempira, el “intelectual” corrió a escribir: “Ojo con ese churro de la devaluación repentina; esa es parte de la agresión contra el gobierno. La cosa es simple, provocar pánico en la clase media, mientras los bancos acaparan, y se desata descontento entre la población. Todo creado desde la CIA, nada de esto es nuevo”. Hasta los economistas están anonadados de sus teorías.
Pero, quien se lleva el premio de bayunco del siglo, es el ministro de SEDESOL, José Carlos Cardona Erazo, quien declaró que Francisco Morazán es equiparable a la figura de Manuel Zelaya Rosales.
El entrevistador se asustó de la aseveración, pero él lo reafirmó porque ostenta nada menos y nada más, que un título de licenciado en Historia.
Cristóbal Colón descubrió Honduras en su cuarto y último viaje a América.
Ingresó por la isla de Guanaja el 30 de julio de 1502. Nuestro territorio tiene una extensión de 112, 492 kilómetros cuadrados, después del fallo de la Corte Internacional de La Haya, Holanda, en 1992.
Francisco Morazán Quesada nació el 3 de octubre de 1792 y fue fusilado por sus ideales, en Costa Rica, el 15 de septiembre de 1842. Por su propia voluntad fue enterrado en El Salvador.
“Suprimid el genio de Morazán y habréis aniquilado el alma de la historia de Centro América, exclamó el orador Álvaro Contreras en El Salvador (siglo XIX).
El poeta chileno y Premio Nobel de Literatura, Pablo Neruda, en su obra “Canto General” exaltó a Morazán en el poema número XXXI.
Un extracto: “Te desmoronan hijos y gusanos, se extienden sobre ti las alimañas y una tenaza te arrebata el sueño y un puñal con tu sangre te salpica
mientras se despedaza tu estandarte.
Alta es la noche y Morazán vigila…”.
Y que vigile bien, no sea que un bayunco de esos lo baje del caballo que está en el viejo parque central de Tegucigalpa y coloque la estatua de otro prócer.
(*) Periodista. Alfabetizadora de Adultos.
