Estudiantes de Corquín embellecen sus centros educativos con siembra de árboles
Unos 36 centros educativos de Corquín, Copán, han implementado la iniciativa de “Save the Children”, con el financiamiento de Unicef y la Agencia de Cooperación Internacional de Corea (Koica).
CORQUÍN, Copán. Una amplia área boscosa rodea el Centro de Educación Básica Miguel Paz Barahona, ubicado en el municipio de Corquín, Copán.
La tupida plantación en el predio escolar surgió con el fin de embellecer y promover la protección del ambiente entre los estudiantes.
La iniciativa es promovida por “Save the Children”, en 36 centros educativos del municipio, como parte del Programa Espacios Educativos Seguros y Amigables “Reimaginando la Educación en Honduras”, que se ejecuta con el financiamiento del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Agencia de Cooperación Internacional de Corea (Koica).
Entre las instituciones educativas participantes se ha logrado plantar más de 3,000 árboles de diversas especies, entre maderables, frutales y ornamentales.
Solo en el Centro de Educación Básica (CEB) “Miguel Paz Barahona”, a la fecha, se han sembrado 300 árboles, en su mayoría frutales, como naranja, cacao, arándano, granada, limón, y mandarina. De igual manera, diversas especies maderables que aportan sombra.
APORTES DE ALUMNOS
El director municipal de Educación, Jorge López, informó que desde hace cinco años inició el proyecto y ha sido sostenido con el apoyo de los alumnos, pues son los que participan de manera permanente en las labores de cuidado de las plantaciones.
“En la mayoría de los centros educativos implementados ha logrado ser sostenible, pese a que el cuidado es permanente y se logra con el apoyo de los gobiernos estudiantiles”, destacó López.
Los árboles son donados por organizaciones que trabajan en la comunidad, y empresas cafetaleras de la zona, de igual manera se han realizado gestiones para la adquisición de abonos y fertilizantes.
De acuerdo con el entrevistado, cada alumno debe aportar una hora diaria, unas cinco por semana, en el programa, por lo que es un proyecto ejecutable con el involucramiento de los educandos.
EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE
Uno de los estudiantes que ha logrado permanecer activo en el programa ha sido Melvin Orlando Pineda, quien conoce a detalle el proceso desde la elección de la planta hasta su cuidado y mantenimiento.
Pineda en la actualidad cursa el noveno grado, y por ser el presidente del gobierno estudiantil es uno de los más involucrados en el proyecto. “Nosotros hemos trabajado desde la preparación del terreno, en las jornadas de limpieza, fertilización y riego, este proyecto demanda de una atención permanente”, indicó.
Las labores de riego se realizan dos veces por semana durante la temporada de verano y también se trata de evitar que crezca la maleza en los alrededores de los árboles, explicó el jovencito de 16 años.
De acuerdo con Melvin Pineda, para alcanzar el éxito con el proyecto, además de su esfuerzo físico, también han colaborado llevando las herramientas que disponen en sus casas, como machetes, barras, piochas y palas.
En este proceso, según el representante estudiantil, ha aprendido “el valor y la importancia de sembrar árboles para mejorar el entorno del centro educativo y cuidar el ambiente”.
Por esta razón, anhela que la iniciativa pueda ser ejecutada también en otros centros educativos del país.
