Apóstol del grupo por encima del individuo, resultadista, líder de vestuario meticuloso y pragmático, Didier Deschamps amplía en el Mundial-2022 su inmenso palmarés, el más completo del fútbol galo. Bajo su mando, toda una generación de franceses se ha acostumbrado a la victoria.
Fue el capitán de la primera estrella, la del Mundial de 1998 en Francia, y seleccionador de la segunda, veinte años después en Rusia. Y quizá lo sea el de la tercera en caso de victoria ante Argentina el domingo (15H00 GMT) en la final en Catar.