Por: José María Díaz Castellanos*
Pareciera que, en esta selección de los magistrados a la Corte Suprema de Justicia, la Junta Nominadora se ha centrado más en el tema de derechos humanos.
Comienzo citando a don Óscar Humberto Luna que ha sido en El Salvador Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, en su libro (Curso de derechos humanos, doctrina y reflexiones, El Salvador- 2010); afirma: “precisar una fecha o época en que los derechos humanos fueron por primera vez reconocidos es imposible, pues estos surgen con el hombre, con la mujer, y para estos; es decir que los derechos humanos tienen vigencia a partir de la existencia de la persona humana”.
En el libro de Génesis 5: 26 y 27: “hagamos al “hombre” a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree los peces en el mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y todo animal que se arrastre sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó”. La Biblia no se refiera al hombre como sexo masculino sino al ser humano: hombre y mujer.
Consultando algunos pastores, indican que esto se refiere a la dignidad del ser humano; cada ser humano es creado por amor. Hay semejanza con Dios. El ser humano no es “algo” sino “alguien”.
No quiero referirme aquí a si el hombre viene por creación o por evolución. Tenemos algo que no tienen las bestias: alma y sabiduría (Proverbios 16). Esta no es una clase de religión, sin embargo, no podemos referirnos al ser humano sin consultar la Biblia. Probablemente el Corán, tenga alguna cita.
Los 10 mandamientos del judaísmo ortodoxo son: 1. Yo soy el eterno tu Dios, quien te sacó de la tierra de Egipto, de la esclavitud. 2. No tendrás dioses ajenos delante de mí. 3. No tomarás en vano el nombre de Dios. 4. Recuerda el sábado para santificarlo; seis días trabajaras y harás toda tu labor, más el séptimo día es shabat, no harás ninguna labor. 5. Honra a tu padre y a tu madre para que se prolonguen tus días sobre la tierra. 6. No matarás. 8. No robarás. 9.No brindes contra tu prójimo falso testimonio.10. No codiciaras los bienes ajenos: la casa de tu prójimo, la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo. Estas leyes eran para que el hombre y mujer las cumpliera.
La iglesia hoy habla de la “doctrina Social de la Iglesia”, Es una concepción del hombre como un ser que atiende la llamada de Dios. Se habla de la dignidad de la persona humana (no del hombre), del bien común, la subsidiariedad y la solidaridad.
Este social lo ha incorporado el Partido Nacional con su lema “Justicia Social con libertad y democracia”. Su base filosófica “El humanismo cristiano” nunca se aprobó ni publicó oficialmente en el Diario La Gaceta; sus líderes nunca lo entendieron y hoy nadie habla de su ideología.
“Justicia social” es acuñada por el sacerdote jesuita italiano Luigi Taparelli (1843). Se usó por primera vez por Pío XI en su encíclica “Cuadragésimo anno”, quien cita a León XIII en la Rerum Novarum.
El partido Democracia Cristiana, fundado en 1968, basa su ideología en la doctrina social de la iglesia.
El Código de Hammurabi era dirigida a las personas: son 282 leyes escritas en piedra, cada crimen iba acompañada de un castigo ejemplar, casi siempre la pena de muerte.
La Carta Magna de Juan sin tierra de 1215 en Inglaterra, condujo al actual Derecho Constitucional; regulaba la mala conducta de los funcionarios, la igualdad ante la ley establece al habeas corpus, la no confiscación de bienes, el proceso por jurados, nadie puede ser juzgado por un rumor, el acceso a la justicia. Constituye el símbolo de la libertad. Quizá lo más significativo es el nacimiento del “debido proceso”.
Durante la edad media, la inquisición (siglo XV), la herejía era un crimen; esa época estuvo caracterizada por violaciones a los derechos humanos desde el punto de vista moderno. Uno de los castigos: la hoguera donde el hereje podía ser quemado vivo. La tortura era con garrucha, potro o tortura de agua.
La Declaración de Independencia de USA del 4 de julio d 1776 dice: “creemos que estas verdades son evidentes en sí mismas, que todos los hombres nacen iguales y dotados por su creador de ciertos derechos inajenables, que entre estos son los principales la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad…”.
En Francia, con la Revolución francesa en 1789. Se emite la Declaración de los Derechos del Hombre: Artículo 1: “Los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derechos…”.
*Catedrático de Derecho UNAH
