Emilio Cabrera, exaspirante a CSJ: “Queremos magistrados que no besen el puñal de oro”

En su bufete, ubicado en una zona popular de Danlí, tiene un aviso que brinda consultas legales. Se trata de Emilio Cabrera, un hijo adoptado de esta ciudad, que también fue maestro de generaciones de las artes industriales, diputado, agricultor y superintendente de concesiones del Estado. Hasta hace unos días, también, era uno de los firmes candidatos a magistrado de la CSJ, pero la Junta Nominadora lo excluyó por una tacha simple: Un reparo administrativo relacionado a sus funciones docentes, hace años. Se enteró por las redes sociales que había sido excluido pero no reclamó porque ese mismo día murió su madre. Hoy, no pide réplica, da por cerrado el caso y solo desea que elijan a los mejores 15 magistrados para el bien del país.

¿Cómo llegó a Danlí siendo de El Porvenir, FM?
Mientras cumplía mi servicio militar obligatorio, me puse a estudiar en el batallón y me gradué de Perito Mercantil, de ahí estudié en la Escuela Superior del Profesorado, ahora, UPNFM, y me asignaron de maestro al Instituto Departamental de Oriente (IDO) y aquí me quedé, me enamoré de Danlí.

¿Se olvidó de El Porvenir?
No, siempre visito mi pueblo, tengo mis familiares y mis amistades.

Ya van tres años de Libre en la alcaldía, ¿mira cambios?
No, desgraciadamente, la verdad que las aldeas están lo mismo, ojalá lleguen nuevos liderazgos.

¿Por qué decidió participar en este proceso de selección?
Es una buena pregunta, pero la verdad que es necesario que al Poder Judicial lleguen magistrados valientes, que tomen las decisiones justas, sin ver colores políticos ni que besen el puñal de oro, como dice el poeta.

¿Por qué lo descalificaron?
Por un reparo administrativo que no tiene nada que ver, como era maestro, estuve de asesor de la dirección de mi colegio con el mismo salario, pero esos son cambios normales en el sistema y cuestiones puramente administrativas que las arreglé en su momento.

¿Le dieron oportunidad de defensa?
Es que la verdad me desatendí del caso porque justamente el día cuando salió la publicación en las redes sociales, que me habían descalificado, murió mi madre y, como comprenderá, ya no pude atenderme de nada.

¿Siente que le ensuciaron el nombre?
Pienso que sí, siento que me descalificaron injustamente pero realmente la gente que me conoce, sabe quién soy y estoy feliz, mi vida sigue, ya cerré ese capítulo y no estoy para hacer reclamos.

¿Quedan en ese listado gente que no debería ir?
Bueno, no puedo hablar mal de nadie, veo que van buenos profesionales del Derecho, como le repito, ahora, esperemos que la junta escoja a los mejores perfiles.

¿Le faltó un padrino político?
No lo creo, yo vengo desde abajo, todo lo que tengo me cuesta y comprendo todos estos procesos, como le decía, participé porque pienso tener los atributos para ser magistrado y cambiar muchas cosas del Poder Judicial.

¿Sería por su pasado michelettista?
Yo no puedo negar a mis amigos y Roberto Micheletti es mi amigo, pero eso no tiene nada que ver, estas eran pruebas de conocimiento y de idoneidad, ahora, solo deseo que a esos puestos lleguen personas de buen corazón, sin odio ni rencores.

¿Está en contacto con Micheletti?
Nos saludamos de vez en cuando, él ya está retirado y yo paso aquí en lo mío en Danlí.

Libre quiere por lo menos 8, ¿le parece justa esa repartición?
Yo creo que Libre debe entender que solo tiene 50 diputados, sí los tiene, y debe considerar a las demás fuerzas políticas, por el bien del país, lo mejor es que se sienten a dialogar y hacer una negociación transparente, que son normales en el Congreso.

Como ex superintendente de concesiones, ¿eran buenos esquemas de inversión?
Por supuesto, siempre y cuando se hagan con transparencia, porque el gobierno no tiene capacidad para desarrollar proyectos y ocupa la sociedad de la empresa privada, mire, por ejemplo, Puerto Cortés, ahora es el puerto mejor calificado de América Latina.

Se habla que son contratos leoninos, ¿tuvo algo que ver en eso?
No, recuerde que mi labor era de supervisión, los contratos los aprobaba el Congreso, más bien, soy el único que multé a Interairport por incumplimiento de contratos, hay que tener valor para hacerlo. Yo también fui el primero que con estudios demostré que EEH no estaba cumpliendo la reducción de pérdidas, ahí están esos informes, yo no sé por qué el gobierno no los toma en cuenta.

¿Y la concesión de los peajes a COVI?
Quiere que le diga algo con toda franquesa: Esa es la empresa que más ha cumplido, invirtió más de 120 millones de dólares cuando agarró la carretera del norte (CA-5), le amplió a cuatro carriles, ahora es la mejor carretera que tenemos.

Dicen que ya estaba hecha, solo de poner las casetas y cobrar, ¿deben eliminar el peaje?
Es mentira, esa carretera no era así, como le digo, COVI hizo muchas inversiones, quitar los peajes ya es una decisión del gobierno, pero hay un contrato vigente que deben revisar.

¿Qué hace en su día a día?
Me retiré del magisterio en el 2009, paso la mayor parte en mi bufete ayudándole a la gente, doy consultas gratuitas aunque me lo prohíba el Colegio de Abogados, voy a la iglesia y en los ratos libres me voy a una propiedad que tengo por aquí.

¿Sigue en política?
Por ahora, no.

¿Qué será del Partido Liberal?
Aunque no nos guste decirlo, el partido no pasa por un buen momento desde ya ratos, pero también es el partido que le trajo el mayor bienestar al país, aunque muchos no lo quieran reconocer, hay que esperar nuevos liderazgos para que se recupere.

¿Cómo evalúa el nuevo gobierno?
No ha sido fácil recibir un país en estas circunstancias, por ahora, como buenos hondureños, nos toca apoyar a la Presidenta Xiomara Castro porque, nos guste o no, es la Presidenta del país.

ÉL ES…
Emilio Cabrera Cabrera nació en El Porvenir, FM, en 1958, pero se radicó en Danlí, El Paraíso. Es Perito Mercantil y tiene una licenciatura en Educación Industrial de la Escuela Superior del Profesorado, ahora, UPNFM. Fue maestro de generaciones del Instituto Departamental de Oriente (IDO) de Danlí. Al mismo tiempo es abogado y notario. Entre el 2006-2010 fue diputado del Congreso Nacional por el Partido Liberal y también se desempeñó como superintendente de concesiones de las Alianzas Público Privadas. Está retirado de la política y se dedica a su bufete, al campo y la Iglesia evangélica.