Un policía pierde la vida en enfrentamiento con mareros (Video)
Luis Armando Zambrano murió en el ataque a la posta.
El sometimiento en que está la población, agarró a los policías “dormidos” de la posta policial de la colonia Divanna, en la capital, muriendo uno de ellos, quien estaba de turno en ese momento.
Los pandilleros que dominan la colonia, en el “reclutamiento” que están haciendo en la zona, trataban de someter a un jovencito, quien logró escapar al cerco que le hicieron los antisociales.
En su escape, no le tocó más que refugiarse en la posta policial, pero los mareros enardecidos, descargaron sus armas .38 y 9mm sobre la posta policial, para liquidarlo dentro del recinto policial, algo que no pudieron.
Para repeler el violento ataque, estaba de turno Luis Armando Zambrano, con 23 años, quien protegió al joven, pero expuso su vida, siendo trasladado herido hasta el Hospital San Jorge, pero murió cuando iba a ser operado.
El informe preliminar de la Policía establece, que eran como las 7:00 de la noche, cuando el jovencito, su nombre está en secretividad, pues corre peligro, llegó corriendo y todo despavorido se fue a refugiar a ese edificio de la Policía Nacional.
El adolescente era seguido por presuntos pandilleros de la “Mara 18” que opera en las colonias circunvecinas de El Pedregal, Las Brisas y Divanna, todas ubicadas al sur de la capital, no respetaron el edificio de seguridad y dejaron “bañada” la posta de agujeros, realizados porque estaban bien armados.
Al verse atacados y ver herido de gravedad a su compañero, los otros uniformados solicitaron ayuda por el Sistema Nacional de Emergencias 911, para que desde la central de la Policia Nacional les enviaran más patrullas y motorizados.
Cuando los demás efectivos llegaron a la posta atacada a tiros, los supuestos pandilleros ya habían huido del lugar escabulléndose por los callejones de la colonia Las Brisas y sus alrededores.
De inmediato, llegaron los refuerzos policiales y saturaron la zona, solo capturaron a un jovencito, para efectos de investigación, pero no pudieron dar con el paradero de los gatilleros.
Los vecinos se encerraron y prefirieron no hablar, ya que la Policía al retirarse, llegan los mareros y ellos se convierten en los “amos y señores” de la zona. (JGZ)
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