Julissa Aguilar, exnominadora de candidatos a CSJ: “En siete años vamos a tener la misma historia”
Antes de darla a luz, su madre recibió los primeros auxilios del doctor Roberto Suazo, cuando todavía no era presidente (1982-1986). En su laberíntica oficina, tiene una Biblia y a la virgen María Auxiliadora para enfrentar con valentía las decenas de casos peligrosos como jueza antiextorsión y sus atribulaciones diarias, como madre de dos hijos y viuda de un esposo asesinado recientemente dentro de un elevador de un conocido edificio capitalino. También integró la Junta Nominadora de los 45 candidatos a magistrados de la CSJ. Se trata de la abogada Julissa Aguilar, quien, ahora repasa con ojo crítico y buen humor el actual estado del sistema de justicia hondureño y todo el polémico proceso de evaluación que culminó con la repartición del codiciado pastel judicial entre los políticos de turno y de siempre.
A ustedes les echan ese “parto” de la CSJ
¿Y por qué?, ¿qué hicimos?
Por haber metido a unos y sacado a otros de la lista
Mire, todos los perfiles que nosotros seleccionamos se acercan un poco más o un poco menos al perfil idóneo, todos ellos tienen las condiciones para ser magistrados.
¿Pensó que el Congreso iba a tomar las 15 mejores notas?
Nunca lo pensé, sería lo ideal, pero uno no puede ponerse una venda en los ojos y desconocer que nuestros diputados y diputadas iban a actuar en función de sus propios intereses.
Mucha gente cree que ya había línea para que ciertos candidatos pasaran y otros no. ¿Le dijeron algo a usted?
No hubo eso y la evidencia es que muchos que se decían tener la bendición política se quedaron en el camino.
En las redes circulan tachas y denuncias contra candidatos. ¿Las revisaron?
En las redes sociales se pueden decir muchas cosas, pero la verdad que muchas tachas y denuncias que ahora dicen ahí nosotros no las conocimos y las que conocimos fueron desvanecidas por los candidatos.
¿Cómo la escogieron para integrar la Junta Nominadora?
A mí me propuso la Universidad Tecnológica de Honduras de la cual soy docente, la directora de mi facultad me preguntó si yo quería, pues, necesitaban equidad de género y yo le dije que sí.
¿Fredis Cerrato se queja de haberlo excluido sin razón?
Contra él se presentó una denuncia de que había incumplido la ley cuando fue nombrado en el cargo y después de la investigación, nosotros consideramos que efectivamente la ley se ha incumplido y, por tanto, una persona que incumple tan abiertamente la ley no tiene el perfil para ser magistrado.
¿Por qué eliminaron a los magistrados que se querían reelegir?
Yo me abstuve de conocer el caso, pero leí la resolución de los colegas y realmente fue porque en el perfil ideal del magistrado se ha establecido que deben regirse bajo principios democráticos y los colegas que votaron sobre ellos estimaron que la conducta que han demostrado durante todos los siete años, especialmente con algunos fallos, no demostraba ese compromiso con Honduras y compromiso de país. Yo estoy de acuerdo con ellos.
¿Es optimisma de la nueva corte?
Soy optimista, tengo esperanzas de que ellos harán lo mejor.
¿Terminaron peleados en la junta?
No, excelente equipo de trabajo, tuvimos diferencias, pero fue un ambiente muy amigable, nos reímos muchísimo, seguimos en contacto, todavía tenemos el chat en común.
¿Debería elegirse los magistrados de otra forma?
Definitivamente, el Congreso Nacional no debería elegir a los magistrados únicamente, hay que buscar otra alternativa porque si seguimos con este proceso vamos a tener la misma historia en siete años.
¿Siempre tuvo inclinaciones hacia el Derecho?
Yo quería ser doctora pero mi papá me dijo ‘vos tenés madera para ser abogada’ y en aquellos tiempos no había nada que discutir con los padres.
¿Se respeta la meritocracia en el Poder Judicial?
En mi caso, sí se respetaron las notas, pero ha sido una práctica en general no respetar los méritos y al proceso de selección todavía le falta transparencia y publicidad.
¿Qué significa ser juez en estos tiempos?
Es una actitud, el juez es solitario, no puede andar en reuniones sociales, se tiene que aislar y no siempre queda bien con todos.
¿Cómo es el día a día de un juez?
Es un estrés laboral terrible, los jueces necesitamos vacaciones profilácticas, porque pasamos viendo casos de crímenes y violencia doméstica, violaciones, asesinatos, día a día y hasta nos llevamos el trabajo a casa, eso es agobiante.
¿Qué falencias le mira del Poder Judicial?
¡Wou!, muchísimas, el nombramiento por méritos, falta de personal, la infraestructura y los bajos salarios, por ejemplo, yo gano 40 mil lempiras y un asistente del Banco Central gana 120 mil.
¿Cómo valora las tres cortes anteriores?
La de doña Vilma Morales para mí fue la mejor, porque fue bastante técnica, la corte de don Rivera para el olvido y esta corte tiene muchas cosas buenas, ha mejorado algunos aspectos con infraestructura, pero los edificios no imparten justicia, entonces, nos quedó debiendo.
¿Cuál es su función actual?
Revisar el trabajo que realizan los jueces, resolver los recursos de apelación de Hábeas corpus, amparo.
Los implicados en extorsión casi siempre salen libres. ¿Qué pasa?
No no, a la inversa, hay mucha sentencia condenatoria en los casos de extorsión, creo que el Ministerio Público debe mejorar la investigación porque el delito de extorsión, que es muy complejo, no es cualquier persona que llega a pedirle dinero. Hay personas que están detrás organizando.
¿La Policía?
No lo podría asegurar aunque existen algunos reportes que la Policía está en extorsión, me parece haber escuchado de un caso específico en el que efectivamente se verificaba que personas de la Policía o de los agentes de seguridad estaban involucradas, no puede descartarse.
¿Qué tanto ha cambiado la modalidad de operar de las pandillas?
Es toda una organización criminal, un entramado, los miembros de maras o pandillas ya no se tatúan, ahora se visten de saco, andan en carro de lujo, van a las universidades, usan tecnología, todo el sistema de justicia va atrás de los delincuentes.
¿Estas políticas de seguridad, como el estado de excepción, han dado resultado?
El toque de queda nunca lo entendí, no están mal estas medidas de seguridad pero necesitamos políticas preventivas porque no vamos a prevenir el crimen en la medida que no se cierre la brecha de la pobreza.
¿Existe un “Código de Impunidad”?
El Código Penal es moderno, lo que ocurre es que en Honduras se aplica lo que los penalistas le llamamos populismo punitivo, esto es, elevar las penas para contentar al pueblo, yo no diría que tenemos un “Código de Impunidad”, la impunidad la da el sistema en su totalidad.
¿Cómo está la equidad de género en el Poder Judicial?
Hay más mujeres que hombres, creo que aquí se cumple la equidad de género.
¿Acoso laboral y sexual?
Muchísimo.
¿Lo dice por experiencia propia?
Sí, no soy notaria por eso, el notariado lo tienen como una moneda de cambio sexual.
¿Lo denunció?
No, aquí no se puede denunciar.
Pero usted es magistrada
Aun así, es un delito difícil de combatir por la cultura machista, por ejemplo, los hombres miran muy normal decirle mi amor, mi reina, mami a las mujeres.
Son piropos, abogada
Pero no debería suceder.
¿Cómo sobrelleva la muerte de su esposo?
Es muy duro sobrevivir a esa situación, muy doloroso, mis hijos todavía siguen sufriendo las secuelas.
ELLA ES…
Yessenia Julissa Aguilar Santos nació en Comayagua, pero se crio en La Paz y Olancho donde hizo estudios primarios y secundarios. Se graduó de abogada en la UNAH con especialidad en Derecho Penal y Derecho Procesal Penal. Posee además un doctorado en Administración Gerencial por la UTH. En los inicios de su carrera, laboró en el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y en el 2002 ingresó la carrera judicial por concurso. Actualmente, es magistrada de la Corte de Apelaciones en Materia Antiextorsión y docente universitaria.