Japón informa a América sobre aguas de Fukushima que verterán en el Pacífico
A más de una década de la tragedia que sacudió al Japón con el terremoto, tsunami y accidente nuclear en la planta de Fukushima, en 2011, los japoneses continúan en su esfuerzo por un buen manejo para mitigar la radiación de los residuos con el desmantelamiento de la planta.
Las autoridades japonesas mantienen una constante comunicación sobre los avances de la reconstrucción y retorno de las comunidades desplazadas en Fukushima, basados en evidencia científica y con acompañamiento del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Para la desintegración de los materiales radiactivos en el agua tratada, producto de los residuos en el desmantelamiento de la planta de Fukushima, las autoridades trabajan por medio de un sistema avanzado de procesamiento de líquidos, que se utiliza para eliminar materiales radiactivos, denominado “ALPS”.
Con este sistema logran una dilución y descompresión de los componentes, al punto de dejarlos muy por debajo de las normas internacionales reglamentarias.
UN LARGO PROCESO
Sin embargo, un isótopo natural denominado titrio, que produce bajos niveles de radiación, pero indisoluble del agua tratada, se mantiene presente en las toneladas de agua que resultan del desmantelamiento de la planta y las autoridades niponas, en base a la legislación nacional e internacional, se preparan para verterlo al agua de las costas del Pacífico.
Con el proceso, que podría durar hasta 40 años hasta el cierre de la planta, buscan diluir el isótopo de titrio, una práctica común en todos los países que trabajan con energía nuclear.
Aunque el hecho preocupa a muchos, el mismo director de la OIEA, Rafael Mariano Grossi, destacó que “los hallazgos del Grupo de Tareas, en su primera misión en febrero del 2022, fueron considerados en profundidad y reflejados en las revisiones del plan por parte de Japón; el OIEA continuará su estudio imparcial y basado en la ciencia del plan de descarga propuesto”.
“La descarga del agua procesada se realizará en el océano Pacífico y se llevará a cabo en plena conformidad con las normas internacionales, por lo que no causará ningún daño al medio ambiente”, destacó Grossi.
CIUDAD RECONSTRUIDA
Pese a todo tipo de noticias en Fukushima, una importante parte de la población que residía en el lugar antes del desastre del 2011, retomó su estilo de vida en la ciudad reconstruida, donde planean habitar por el resto de sus vidas, ya que es una de las zonas con hermosos paisajes del Japón.
Las autoridades japonesas difunden constantemente información sobre las actividades que se ejecutan en acompañamiento con la OIEA, en Fukushima, a toda la comunidad internacional y especialmente a los países vecinos como, República de Corea, China y Rusia y a todos los que comparten el océano Pacifico. (Por: Kristian Soriano)
