La escritora y periodista BLANCA MORENO, también columnista de Diario LA TRIBUNA, ha presentado su último libro, intitulado “Y DE LA ÉPICA HAZAÑA EN MEMORIA…”, (tomado del texto de nuestro Himno Nacional) que alude a la muerte del primer defensor de la soberanía nacional, el cacique Lempira. La Librería “Navarro” fue la sede de la presentación de la obra, el sábado 18 de marzo recién pasado.
El tema de la obra, como se señala anteriormente, es la muerte de Lempira, a manos del oficial del ejército español RODRIGO RUIZ. Este hecho no se discute, porque fue verificado en el Archivo de Indias de la ciudad de Sevilla, España, donde existe un legajo que contiene la llamada PROBANZA que se formó en el Virreinato de México. Las investigaciones y análisis de Blanca Moreno, nos obligan a reflexionar sobre los fundamentos de dicha PROBANZA (que carece de pruebas), como bien señala la autora del libro. En efecto, las declaraciones de los testigos presentados por RODRIGO RUIZ, son en su gran mayoría “de oídas”.
“Es evidente, que el relato de los hechos que realizara el testigo de oídas no tendrá relación con aquellos que él hubiera percibido de manera directa, sino que se referirá a hechos respecto de los cuales tuvo conocimiento de manera indirecta, por la referencia o transmisión que sobre los mismos le hubiese efectuado otra persona” (Legis-Ambito Juridico. www. Ámbito jurídico. Com.)
En el pliego del reclamo de compensación económica que por los servicios prestados a la Corona Española en la “pacificación” de las provincias del sur de México, Guatemala y Honduras, Rodrigo Ruiz formula una serie de cargos contra Lempira, que justifican, a su juicio, el asesinato del jefe indígena hondureño. El primero de dichos cargos lo enuncia R.R. como TRAICIÓN.
Cabe entonces, la pregunta: Traición, ¿a quién? LEMPIRA no era un súbdito del Imperio Español, razón por la cual no podía traicionarlo. En todo caso, habría sido traidor a su pueblo, sino hubiese defendido el territorio que legítimamente ocupaba la confederación de tribus que él comandaba, Por otra parte, la cantidad de contradicciones en que incurrieron los testigos, lleva obligadamente a la conclusión de que la PROBANZA de R.R. carece de pruebas. Es más, de la transcripción de sus dichos, se colige se trataba de un guion elaborado y memorizado por los testigos, pues el texto de las declaraciones, es exactamente el mismo, invariablemente, hasta en los signos de puntuación. En el ambiente judicial hondureño, se les llama testigos de línea. Y reciben pago por declarar.
La versión más probable de la muerte de Lempira, tendría que haber ocurrido, cuando Ruiz, utilizando un largo lazo que utilizaba para introducir su largo cuerpo de más de dos metros de estura, descolgándose de algún risco, para penetrar en las cuevas. Lo hizo en varias ocasiones. Así sorprendió a Lempira mientras descansaba y le cortó la cabeza que después salió a exhibir como trofeo de guerra.
Nuestro cacique Lempira, que los españoles llamaban Capitán, defendió con valentía y denuedo la soberanía del territorio que hoy lleva su nombre. ¡LOOR A ÉL! ¡CONGRATULACIONES BLANCA MORENO!
Tegucigalpa, M.D.C., 25 de marzo de 2023.
