Adicción al Free Fire podría estar ocasionando suicidio de jóvenes

Expertos internacionales en adicciones se han opuesto fuertemente a la idea de considerar los videojuegos como un elemento adictivo, pero los hondureños en reiteradas ocasiones han sido testigos de cómo estas adicciones han cobrado la vida de niños, adolescentes y jóvenes.

El último caso fue el de un joven que residía en la colonia Cerro Grande, quien según sus familiares era adicto a un juego de armas llamado Free Fire, que era algo repetitivo para él.

La psicóloga del Hospital Escuela (HE), Gabriela Chavarría, explico que las conductas repetitivas en estos videojuegos en los jóvenes, niños y adolescentes puede generar muchos cambios que no son buenos.

“Cuando las personas son muy dependientes del uso de los videojuegos, no descansan, no duermen, y eso genera alteraciones en el estado de conciencia, así como las alteraciones perceptuales”.

“Y con esto se inicia a generar delirios y ahí ya estamos hablando que pueden estar generando un tipo de crisis y si no reciben un tratamiento, pueden llegar a un intento suicida o suicidarse como tal”, explicó Chavarría.

Los familiares de este joven se llevaron la sorpresa de encontrar su cuerpo ensangrentado en una de las habitaciones de la casa, y aseguraron que no tenían idea de cómo obtuvo el arma.

Preliminarmente se dio a conocer que el menor era aficionado a los videojuegos, específicamente a “Garena Free Fire”, un juego de guerras que consiste en acción y aventura y que se juega en tercera persona.

Consiste en que hasta 50 jugadores caen desde un paracaídas en una isla en busca de armas y equipo para matar a los demás jugadores.

Expertos aseguran que este videojuego ha influido en el comportamiento de menores que lo juegan. En ese sentido, los padres del ahora occiso comentaron que Fernando, les dijo a sus amigos que tenía problemas de enojo, adicción e ira con un determinado videojuego, por lo que creen que ese fue uno de los motivos que lo llevó a suicidarse.

Este sería el cambio de conducta al que los expertos en salud mental se refieren y que asegura que necesita atención y un tratamiento para evitar que las personas atenten contra su vida.

Chavarría, indicó que este caso ha sido muy impactante por la pérdida de una vida que se pudo salvar y por el uso excesivo de este juego, la dependencia a estos videojuegos.

“Aquí también hay un factor respecto a los familiares, el tipo de apoyo que están recibiendo. Como familia se debe estar pendiente de los cambios conductuales de estas personas, las alteraciones”.

“el estado de vigilia, el sueño. Influyen muchos factores, no necesariamente antecedentes patológicos o mentales, sino el mismo hecho de la conducta repetitiva puede llevar a tener una crisis”, indicó.

Al tiempo que aseguró que también se debe valorar el contexto del paciente, antecedentes patológicos y familiares.

Como especialista recomendó a los padres de familia que se debe establecer normas y que los padres deben tomar sus roles, y definir límites del uso y abuso de este tipo de videojuegos.

Y explicó que las personas que son adictas a estos videojuegos se asilan y dejan de tener relaciones sociales, y solo se enfocan en este tipo de juegos que en muchos casos ha dejado muertes y cicatrices físicas y psicológicas imborrables.

En otros casos donde no hay un buen lazo familiar o poca supervisión de los padres, los menores se exponen a juegos como “La Guija”, que es considerado un juego diabólico.

Un joven se introdujo una varilla de hierro, luego que escuchó supuestamente “voces demoniacas”. Se trata de Hugo Munguía de 20 años de edad quien reside en el departamento de Choluteca, según el joven, “escuchó voces extrañas” tras jugar “La Guija” y le ordenaba que debía meterse este objeto para que su madre no fuera atacada por Satanás.

Al parecer el joven ya había estado llevando un tratamiento psicológico, pero este habría recaído, y se sometió a jugar este juego que casi le cuesta la vida.