Por: José Roberto Valenzuela*
Nadie puede negar que existe una lucha por el reacomodamiento del poder en el tablero mundial, hoy detallaré cómo Europa hizo un mal cálculo que condujo al error estratégico más importante del año, el acuerdo de granos de Tiesto. Ucrania cuenta con el 56% de tierras cultivables, exportando la mayor parte de su grano a Europa occidental, de ahí el apodo del granero de europeo.
El error europeo llegó por no tener toda la información económica que deberían, confiar su seguridad alimentaria en un Zelensky que no está para jugar en la mesa de los chicos grandes y un EEUU con la mente en China, el posible cierre del gobierno, sus repercusiones y controlar su inflación.
Bruselas y Kiev centraron sus ojos solo en el grano ucraniano y se olvidaron de la Geoeconomía. Este acuerdo afectó la agricultura y economía, polaca, rumana, búlgara, eslovaca y húngara, debido a que se inundó sus mercados dicho grano, creando un sentimiento anti ucraniano que llevó a modificar el discurso de sus líderes; Ejemplo, el discurso del premier Polaco en la 78th Asamblea de la ONU “las autoridades Ucranias, son como una persona que se está ahogando, y se agarran de todo lo posible” ” se puede actuar de forma que el ahogado no haga daño”, días después, agregó “Ya no entregaremos armas a Ucrania porque ahora nos estamos equipándonos con las armas más modernas”. Polonia es un país que ha apoyado grandemente a Ucrania, pero está a las puertas de unas elecciones parlamentarias y sin duda las palabras del premier polaco no son ejemplo de una política de buena vecindad, -por lo que lo llevó a pedir disculpas, atacando a los medios de comunicación por malinterpretar sus palabras, pero en esas líneas no hay mucha o ninguna capacidad de interpretación- pero estas palabras, son un buen termómetro del sentir de la sociedad de los países de Europa del este, respecto a las políticas de la eurozona hacia Ucrania.
¿Está ganando Putin la batalla del grano? Para esto remontémonos al 2022 cuando se inició dicho acuerdo, en ese momento se estaba dando una transición de proveedor energético y alimenticio en el mundo, suscitando en un aumento de precios, por lo que los aliados de Rusia, China, India ,Irán, Indonesia, Malasia, Egipto y algunos de países del sur, le pidieron a Putin sentarse en la mesa de Tiesto y asegurarles el envío del grano -Hay que tener en cuenta que estos aliados no solo brindan oxígeno a Rusia, sino que le ayudan a evadir las sanciones occidentales-. Estos aliados y la base de una mala cosecha rusa obligaron a Putin, a hacer una correcta lectura de su debilidad en ese momento, y sentarse a negociar el acuerdo.
En el 2023 las cosas cambiaron, Rusia logró una cosecha espectacular de 123 millones de toneladas, de las cuales 87 millones son de trigo, proveyendo un margen de exportación de hasta 55 millones de toneladas, volúmenes que provocó una caída en el precio del 60%. Esto para Rusia es bueno, porque su precio está contenido para sus aliados y los costos de producción de Rusia son casi 50 USD más barato que occidente, es decir que Rusia no solo tiene capacidad para abastecer él y sus aliados, sino que puede optar por conseguir nuevos clientes que antes compraban a occidente, por tanto, ¿Qué puede hacer que Putin se siente a negociar el acuerdo del grano este 2023-2024? Nada, por otra parte, Putin, sigue burlando cómodamente las sanciones occidentales transportando petróleo y granos en su flota de barcos fantasma, debido a que los seguros navieros no aumentan de precio, puesto que Ucrania, solo ha podido llevar el conflicto a Crimea y Sebastopol, no a aguas profundas del mar negro. Sin embargo, el grano ucraniano no puede navegar libremente por dicho mar, volviendo al tema de cruzar por los países de Europa del este, dividiendo momentáneamente a la eurozona, división que traerá consecuencias en la reunión de Granada.
Occidente tiene 3 opciones para resolver este error:
Esperar a febrero de 2024 y aguantar estos precios bajos durante todo el invierno.
Que la UE pague con subsidios a los países afectados. Algo peligroso porque estaría promoviendo un dumping. Ilegalidad que la señora Van Der Leyen, acusó a China con su industria de vehículos eléctricos; igualmente echar andar la maquinita de hacer dinero, generará más inflación.
O, levantar las sanciones a Rusia, para hacerle volver al acuerdo de Grano. Este es el objetivo de Putin, porque él ya tendrá una idea de cómo irá la cosecha 2024-2025. Las cartas de sanciones a levantar para llegar a esta mesa seguramente serían, que bancos rusos sean insertados nuevamente al sistema Swift para la comercialización de productos agrícolas y fertilizantes, y permitirle la importación de maquinaria agrícola.
*Doctor Ciencias Políticas – geopolítica y estudios estratégicos-. Diplomático Hondureño y Consultor en geoestrategia.