Por amor a la literatura: La III Feria del Libro de San Pedro Sula
Por: Elvia Elizabeth Gómez García*
Es muy popular el uso de la frase “por amor al arte”. En Honduras cobra verdadero significado cuando tras bambalinas, podemos ser partícipes del verdadero valor de impulsar iniciativas culturales que van más allá de una recompensa monetaria. Si no genera ingresos, ¿Para qué esforzarse?
Eso es justo lo que sucede, encontrar apoyo para este tipo de actividades es como buscar una aguja en un pajar. En mi percepción, va ligado al poco interés que las instituciones educativas le dan a la formación complementaria de los diferentes programas académicos. Las humanidades y las ciencias sociales no deben estar reñidas con las ciencias exactas y la formación técnica. No sabemos la poeta, el cuentista o la novelista que se esconde tras dichas formaciones.
Vaya tarea titánica la que involucra montar y desmontar un evento cuya finalidad no es generar dinero, sino impulsar a aquellos que la tienen “cuesta arriba” en un país donde no se lee, no se va al teatro, no se va a conciertos de música clásica o no se aprecia la riqueza artística de la danza.
La Feria del libro de San Pedro Sula se ha desarrollado en su tercera edición, y este año tuve la oportunidad de poder trabajar mano a mano (entiéndase literalmente) junto a un equipo comprometido con un sueño que se volvió posible. Editoriales, librerías y escritores nacionales e internacionales se dieron cita durante tres días llenos de inspiración y de arduo trabajo. Se tuvo para todos los gustos y se logró el objetivo de llegar a los jóvenes, a quienes debemos mostrarles nuevamente lo fascinante que es leer un libro.
Pero, para poder disfrutar del evento, hay tras el telón todo un engranaje que busca patrocinios, que araña lo poco que tiene para poder cumplir con un sueño que no es material, y cuya recompensa es la satisfacción del deber cumplido.
El problema es, que esos sueños no tienen cabida en una sociedad en donde lo que se valora es el éxito monetario por sobre la simpleza de las cosas. Son pocos los que realmente llegan a entender que la riqueza no se mide por la acumulación de bienes, aunque para los amantes de la lectura, el mayor tesoro son todos los libros que pueda tener.
Pero, pese a ese sombrío panorama, el comité de la Feria del Libro de la mano de su director Giovanni Rodríguez no se da por vencido y se abre camino poco a poco, en una ciudad en la que ni siquiera se cuenta con una casa de la cultura y en un país donde lo propio es visto de menos. Los escritores nacionales pocas veces logran encontrar espacios que les permitan presentarse ante un público que pueda conocerlos y valorarles en toda su dimensión. La feria del libro de SPS busca eso, darles su lugar y su oportunidad a los escritores nacionales, y a la vez, acercarnos a los escritores internacionales que son contactados y dicen presente. Como ha expresado Giovanni “La FIL SPS es posible gracias al aporte de sus participantes, sus patrocinadores, aliados, colaboradores y voluntarios. Esa fórmula es la que garantiza su independencia y su crecimiento”.
Con palabras de Horacio Castellanos Moya se inició la feria en donde se desarrollaron presentaciones de libros, conversatorios y actividades para niños y jóvenes como el cuentacuentos. Tuvimos la oportunidad de escuchar a escritores de la talla de Toni Hill de España, Francisco Alejandro Méndez de Guatemala, Philippe Ollé-Laprune de Francia, Mario Bellatin y Liliana Blum de México, Jaume Segura Socías, quien es el actual embajador de la Unión Europea en Honduras, por mencionar algunos autores que hicieron de esta feria un evento internacional.
Mención especial merece nuestra queridísima Helen Umaña, quien ha destacado por sus estudios sobre la literatura hondureña y se ha convertido en la “arqueóloga de la literatura nacional”. Hace muchos años tuve la oportunidad de escucharle disertar sobre el poder de la palabra, encontrarla nuevamente ha sido un honor. En una ocasión Helen expresó que “en cualquier circunstancia, escribir es asumir posiciones”.
La Feria del Libro de San Pedro Sula merece también una mención especial.
*Profesora universitaria.
