¿DE LA SOMBRA?

ZV
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28 de diciembre de 2023
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12:51 am
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¿DE LA SOMBRA?

ME encanta la frase –mensaje de la defensora de DD. HH.– “el regalo de Navidad eres tú cuando te conviertes en amigo y hermano de todo ser humano”. Y ese cierre tan maravilloso: “No hay frío que valga cuando te sientes cobijado por el calor de la amistad”. “Yo solo puedo decirle que usted ha ganado, a lo largo de su vida, amigos de verdad; aunque no nos vea ahí nos tendrá siempre”. La amiga que quedó de traerle la bañera a Winston: “Hermosas entregas navideñas que calientan el corazón –justo y necesario– entre los sobresaltos e intrigas del acontecer”. “Ese Winston tiene garra, los míos son gallinas y se meten bajo las camas cuando escuchan los estallidos de la calle”. De la abogada amiga: “Sin duda alguna es tan agradable despertar cada mañana, tomar el respectivo café y leer su editorial”. “Siempre tenemos curiosidad de qué se tratará y lo mejor de todo es que nos mantiene atentos, entusiastas y motivados”. La amiga notaria de Siguatepeque: “No hay frío cuando uno tiene la familia reunida, pero unida”. “Se siente alegría en los abrazos, la comida placentera y es un solo sueño el 2024”.

De otra buena amiga: “Seguro que a los que amamos nunca los dejaremos solos; aunque salgamos buscamos quien les da amor y cariño hasta nuestro regreso y así no nos extrañen tanto”. Alusivo a este cierre: (-Oíme –inquiere el Sisimite– ¿por qué le ladrás a la gente cuando se abrazan? -Por si las moscas –explica Winston– es que la gente es rara, si son abrazos de bienvenida, saludándose unos con otros, ni modo, pero me inquietan las despedidas; cuando se van no se sabe si a uno lo van a dejar solo). Contribución de otra lectora para el colectivo: Joaquín Sabina publicó estas palabras: “Pues no… Esta vez no te voy a desear ni feliz Navidad, ni feliz Año Nuevo”. “Eso ya lo hace todo el mundo, incluido yo”. “Hoy te deseo otras cosas: Te deseo coraje para decir basta; te deseo que olvides a quien se olvidó de ti, te deseo que puedas cerrar puertas y abrir ventanas; te deseo que no te conformes, que no te quedes con la culpa; te deseo que te atrevas; te deseo que te quieras; te deseo ojeras y risas; te deseo locura y magia; también te deseo errores para aprender; te deseo viento para dejarte llevar; te deseo chispas en la mirada, colores para los días grises, paraguas y refugio para las tormentas, lluvia para calarte y sol para calentarte; te deseo muchos “te echo de menos”; te deseo abrazos de los que duran toda la vida, cuando cierras los ojos y los recuerdes; te deseo viajes, muchos viajes, porque son hacedores de nuevos recuerdos; te deseo huracanes de emociones, que te hagan sentir que te elevas de tu cuerpo; te deseo que te quieran sin que te necesiten ni posean; te deseo que ames también en la distancia; te deseo una y mil nuevas canciones favoritas y nuevas fechas que te hagan sonreír; te deseo besos bonitos, brindis con los labios; te deseo ganas de seguir adelante; y… tiempo, mucho tiempo para disfrutar de tu vida… Y de la de todos los que aman”.

El viejo amigo constituyente: Tenés una cualidad, entre muchas otras, que le rindes culto a la amistad y tal es tu confianza que “te cobijas en ella, para cubrirte de los gélidos vientos que soplan allá arriba”. Alusivo a este cierre: “Tengo que reconocer –entra el Sisimite– que sos un buen amigo. Subiste al empinado pico de esta montaña, tolerando las ráfagas de estos gélidos vientos que soplan aquí arriba, que al colarse por el abrigo de los pelos hacen más insoportable la intemperie, a compartir conmigo torrejas y nacatamal. -Pues sí –se estremece Winston– no hay frío que valga, cobijado por el calor de la amistad”. (Fin de la cita). “Así lo expresas en tu editorial de hoy”. “Allí arriba donde estás debes de cubrirte de los borrascosos vientos que, de vez en vez, arrecian en esas alturas”. “Concita envidia”. (Debo reconocer –entra el Sisimite– que te puliste con esa ocurrencia que la amistad cobija cualquier frío. -Ah, y a propósito de la envidia –solloza Winston– es como la oscuridad de la sombra, que aparece cuando brilla la luz del sol”).

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