Por: Mario E. Fumero
Uno de los grandes flagelos que enfrentan los países ricos, principalmente Estados Unidos y la Comunidad Económica Europea es la cantidad de inmigrantes que de forma ilegal invaden sus territorios. Esta migración ilegal es originada por varios factores, tales como la miseria, la inestabilidad política, la violencia y la búsqueda de un futuro mejor. Podemos afirmar, sin lugar a equivocarnos, que estas dos regiones del mundo están sufriendo una invasión silenciosa que pone en peligro la seguridad nacional.
¿Y por qué digo que ponen en peligro la seguridad nacional? Porque indudablemente entre los que buscan asilo, hay personas necesitadas, pero también hay personas que quieren destruir la economía de los países occidentales, arrastrados por el fanatismo islámico o las conductas ilegales, como es el narcotráfico y el terrorismo. Entre los que buscan llegar a Estados Unidos y Europa Occidental se encuentra gente buena, agobiada por la miseria y la estabilidad política, pero no cabe duda de que entre ellos también se infiltran delincuentes, terroristas, fanáticos. Integrantes de maras y personas indeseables, que no buscan el bienestar económico sino desestabilizar y dañar al país invadido lo que pone en peligro la seguridad de estas naciones.
Es por ello por lo que en Francia y Alemania la cantidad de inmigrantes que han entrado al país de forma irregular están causando serios problemas de seguridad nacional, principalmente en actos de terrorismo y en país francés a cantidad de inmigrantes va a superar en pocos años a la población nacional. Por lo que se propone en las altas esferas medidas drásticas para frenar la migración, en este caso procedente de países islámicos.
Mientras que el panorama de la migración europea es sombrío, en América Latina miles de personas viajan hacia el norte, con el propósito de entrar a los Estados Unidos de Norteamérica desesperados por la miseria e inestabilidad de sus países, estando dispuestos a arriesgar sus vidas emprendiendo la ruta de Centroamérica a México para llegar a los Estados Unidos, país que confrontan una invasión migratoria que sobrepasa los límites de su capacidad para atender a todos estos inmigrantes.
No cabe duda de que los países ricos enfrentan un serio problema en su población, ya que debido a la planificación de la natalidad de años atrás, hoy se encuentran con una población envejecidas, y poca mano de obra joven, por lo que necesitan recursos humanos para mantener activas la economía nacional, y la migración por lo general lleva a muchos jóvenes hacia esta región. El problema no está en que haya una migración que busque superarse, y llene un vacío dejado por una población envejecida y no renovada, sino la forma en que esta migración se está originando, la cual opera ilegalmente, por medio de coyote, sin evaluación y con el peligro que junto a fueras productivas, se infiltren delincuentes y terroristas que pongan en peligro la seguridad nacional.
¿Por qué emigra la gente a Estados Unidos y Europa Occidental? Por qué en estos países hay estabilidad política y una economía fuerte. No hemos visto hasta ahora que la gente busque emigrar hacia Cuba, Venezuela o Nicaragua sino más bien vemos que el gran porcentaje de los emigrantes proceden de estos países para buscar desesperadamente, y arriesgando sus vidas, el sueño norteamericano.
Si analizamos fríamente el origen de la mayoría de los inmigrantes, descubrirán que todos ellos proceden de países inestables, corruptos, inseguros, y con un deterioro político muy serio. Así que la migración ilegal representa una invasión silenciosa que pone en peligro la estabilidad de los países que la aceptan, y no buscan los medios de controlarla de forma legal, lo que con el tiempo les pasará factura.
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