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Cnel. (R) FAH
Francisco Zepeda Andino
Al analizar la situación actual de Honduras, uno puede creer que nos estamos refiriendo a varios políticos pero no es así, aun cuando eso es una realidad. Dentro del caos permanente del sistema de circulación vial en las ciudades gemelas, Tegucigalpa y Comayagüela, la Alcaldía del Distrito Central y las autoridades de Tránsito en la Policía Nacional, son las llamadas a implementar las medidas necesarias tratando para aliviar el problema y aparte de lo anterior, aparecen disposiciones, sistemas o rotulaciones inservibles porque una buena parte de nuestra población no practica el mínimo acatamiento de las leyes.
No hay una base en educación vial escolar, desconocimiento de las leyes de Tránsito por los usuarios, recurso humano y equipo limitado en las autoridades policiales, aunado al irrespeto prevaleciente por normas legales, deficiente infraestructura para movilidad y hasta una complicada irregularidad topográfica capitalina, se combinan para darnos la situación actual.
Podría argumentarse que nuestros niños o adolescentes no requieren una mínima educación vial dados los niveles de pobreza prevalecientes, pero si logramos salvar una tan sola preciosa vida infantil enseñando como cruzar una calle o carretera, caminar de frente al tráfico para evitar ser embestidos por la espalda, etc., estará bien empleado el poco tiempo necesario para eso. ¿Cuántos conductores de automóviles saben que en una intersección, con el semáforo en rojo se puede doblar a la derecha con la precaución debida? ¿O en una intersección sin semáforo el automóvil virando a su derecha tiene la preferencia sobre el que lo hace a su izquierda? Y así podíamos citar muchos eventos que tienen relación directa al desconocimiento de las leyes y normas.
No sabemos si será por ego, o por aquello de “todo lo anterior no sirve”, que con cambiar nombres a organizaciones o entidades, se cree estar dando soluciones a problemas cuando en la realidad no se resuelve lo esencial. Por eso ahora ya no es un policía de Tránsito sino un policía de Vialidad. Somos tan “sencillos” que hasta para tener un logo en texto hemos adoptado lo de otros países. “Servir y Proteger” no es sino una copia del “To Serve and Protect”, de la Policía norteamericana.
Recurso humano capacitado suficiente y diverso equipo adecuado, son necesarios para las múltiples tareas por cumplir en la difícil labor de reglamentar, controlar e implementar las leyes normativas de la circulación vial. No sabemos con exactitud la cantidad de agentes asignados para labores de control vial, pero es evidente su exigua cantidad. Por una razón desconocida, quizás por costos, en Honduras hemos dado prioridad a los llamados carros pick-up o popularmente, “pailas”, para transporte de personal policiaco o captura de delincuentes. Todos los días vemos circular esos vehículos con agentes sentados en los bordes exteriores del mismo. Si a los “civiles” se nos exige cinturones de seguridad, ¿qué pasa con el personal policiaco?
Hace pocos días, la joven agente Karen Dinabel Escobar perdió la vida al caer de la “paila” donde se transportaba, impactando con su cabeza en la calle. Esa situación debió haber llamado la atención del mando policial y tomar las medidas necesarias para evitar la repetición de ese tipo de tragedias .Si se da una persecución policial en una vía amplia o en horas de poco movimiento, ¿podrá un “pick-up” detener un automóvil que fácil alcanza 130-150 kph? ¿Y si lleva personal en la parte de atrás?
Motocicletas de gama superior, carros adecuados para altas velocidades en carreteras o avenidas, deberían ser parte de una lista de necesidades policiales, aunado a equipos de comunicaciones seguras, entre otros. El sistema 911 con sus cámaras de vigilancia debe estar conformado por personal capacitado y no activistas políticos improvisados.
Dentro las múltiples responsabilidades de la Alcaldía del Distrito Central, está contribuir a la segura y expedita movilidad de personas o bienes. Eso incluye una adecuada rotulación o pintura en calles y avenidas. Pero, y es un “pero” muy grande, ¿cuántos conductores acatan una señal de ALTO en una intersección? El octágono obliga al móvil a hacer una pausa de 2-3 segundos, asegurarse de no haber tráfico conflictivo y reanudar su marcha. Ese rótulo es totalmente inservible en Honduras. No porque no sea necesario sino porque no hay quién haga obligatorio su cumplimiento. Continuará.
