¿DIBUJARLO TODOS?

ZV
/
9 de febrero de 2024
/
12:48 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
¿DIBUJARLO TODOS?

NO teníamos intención de referirnos –por más impactante que fuese para los chilenos, la noticia circunscrita a un acontecimiento de naturaleza doméstica– al fallecimiento de un exmandatario acaecido en el trágico accidente del helicóptero que él mismo piloteaba. (Más bien, en varias ocasiones, en esta columna de opinión, comentamos el desacierto de Piñera, tentado a salir de sus apuros momentáneos cuando se le calentaron las calles, convocando a una convención constituyente –paralela al imperio de la ley vigente, ya que el Estado de Derecho no estaba roto como para encauzar al país a esa tonta aventura– dizque en sustitución “de la Constitución que les dejó el dictador”. Si bien esa frase se convirtió en muletilla de campaña, para vender la inventada necesidad de una nueva Constitución, la verdad es que no es tan cierto que la actual fuese fruto del pinochetismo. Por el contrario, la Constitución vigente fue producto del cambio hacia la democracia –impulsado por los partidos políticos–cuando ganó el referéndum del “NO” que botó a la dictadura).

Durante toda esta etapa en democracia, la tal Constitución, dizque les dejó el dictador, ha sido motivo de innumerables enmiendas siguiendo el proceso de la reforma constitucional. Igual pudieron haber hecho con cualquier otra parte de su contenido que requiriera cambiarse. Sin embargo, los políticos son dados al disparate oportunista, y la salida a la crisis coyuntural del gobierno fue convocar una constituyente. Para nada. Gastadera de dinero y de tiempo. Llevan no uno sino dos procesos fracasados. En la primera ocasión, bajo el impulso de la crisis callejera, ganó la izquierda el control de la asamblea. Lo que sacaron fue un adefesio moldeado a su interés estrecho, que –pese a que Boric, ya en el poder, jugó su prestigio apostando a la aprobación– fue totalmente rechazado en un plebiscito nacional. Los necios, ni cortos ni perezosos, sometieron el país a otra elección para una nueva convención constituyente. Esta vez ganó la ultraderecha. Intentaron –colocando juristas y expertos a la elaboración del anteproyecto– de adornar el primer fiasco en un segundo intento. Pero igual, cuando el otro mamarracho –esta vez inclinado a la diestra no a la siniestra– lo sometieron al plebiscito, fue desechado. (Fin del cuento). Así que, de no ser porque un miembro del colectivo tuvo la gentiliza de remitir el mensaje del actual inquilino de la casa de gobierno refiriéndose al penoso suceso, no lo hubiésemos abordado. Lo hacemos, más para demostración de la civilidad en el comportamiento de otros pueblos. El gobierno de turno decretó tres días de duelo y funerales de Estado. En un mensaje difundido en redes sociales, el izquierdista Boric elogió al líder conservador.

Tras ofrecer muestras de condolencia a su cercana familia dijo: “El presidente Piñera contribuyó desde su visión a construir grandes acuerdos por el bien de la patria”. “Fue un demócrata desde la primera hora y buscó genuinamente lo que creía era lo mejor para el país, como –por ejemplo– cuando asumió la reconstrucción del país tras el terremoto del 27 de febrero de 2010 o cuando se jugó con gran determinación por rescatar a los 33 mineros de la mina San José o también más recientemente en la gestión de la pandemia en tiempos de incertidumbre a nivel mundial”. Anunció haberse comunicado con los expresidentes Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, quienes “harán todo lo posible por participar en su funeral”. (Para que aprecies –entra el Sisimite– la conducta en países civilizados. -Bueno –interrumpe Winston– todos son pintorescos paisajes acabados, solo que unos más menesterosos que otros. ¿Supiste que finalizó su mensaje rememorando una frase de su antecesor?: “Chile somos todos y debemos soñarlo, dibujarlo y construirlo entre todos, como los amigos que somos”).

Más de Editorial
Lo Más Visto