Lo que se viene después del juicio de JOH: “No hay cambios, solo nuevos líderes”

Hay dos declaraciones en el juicio del expresidente Juan Orlando Hernández, que retumbaron en la sala sobre la situación de la política y el narcotráfico en el país. Una es del Cachiro, Devis Leonel Rivera Maradiaga y la otra es del propio exgobernante.

-Colon: ¿Sabillón te sugirió grabar?

-Devis: No, mi prima.

-Devis: En Honduras es común que los políticos acepten sobornos relacionados con la droga y luego los nieguen.

En otro momento, el expresidente, Juan Orlando Hernández, interrogado por el fiscal, Jacob Gutwillig, dejó claro cómo se comportan los carteles con las campañas políticas:

-AUSA: Los Valle apoyaron a otro partido, ¿no?

-JOH: Los narcotraficantes no tienen partido, señor.

-AUSA: Pero apoyan a los candidatos, ¿no?

-JOH: Sí. O lo intentan.

Estas declaraciones, según los analistas del patio, dejan un mensaje claro. Que nada cambiará en el país con respecto a la relación del narcotráfico sobre la política o viceversa. Es más, se atreven a decir, los reemplazos de estos capos confesos en Nueva York trabajan libremente con la protección de otros y hasta de los mismos políticos mencionados en el juicio.

“Honduras necesita más que un poco de justicia extranjera”, señala el escritor hondureño Godofre Eromeun, autor del libro, El último profesor, relacionado a estos temas. “Sus ciudadanos, agrega, deben examinar cómo funciona la democracia en otros países y exigir con ideas claras, un mensaje directo para los que estudian Derecho”. Concluye su comentario diciendo: “No puede ser que después de que “Mel” cayera en el 2009, viéramos cómo el tirano JOH asegurara su poder, los fraudes electorales, y todavía sigamos igual. Esa es la realidad: no hay cambios, solo nuevos líderes en el poder que creemos mejores o que solo sirvieron para quitarnos de encima a los peores”.

¿CUÁL ES LA RUTA?

El analista político, Luis León, va más allá al afirmar que los hondureños y las autoridades deben reflexionar sobre el futuro del país en el corto plazo de cara a nuevas elecciones, en lugar de dejarse llevar por la euforia del veredicto en contra de Hernández.

“Ya tenemos a un culpable, ¿Cuál es la ruta para mañana? Estamos metidos en una discusión de quién es más corrupto, más narco y cuando lo vamos a ver preso y no en cómo estará Honduras en diez años”, señaló.

En lo que concierte al giro que pueden dar las investigaciones en el país sobre los personajes políticos mencionados en Nueva York, algunos analistas tampoco creen que las cosas pasen a más.

El criminólogo Gonzalo Sánchez considera que no se le puede dar credibilidad a priori los testigos a menos que los Estados Unidos tengan investigaciones en curso aun cuando en Honduras, agrega, se sabe que el narcotráfico financia las campañas políticas desde hace muchos años. “No lo digo yo, es un secreto a voces, que las campañas se han financiado con el narcotráfico con la condición que los políticos les van ayudar cuando lleguen al poder, eso lo sabe Juan Pueblo”.

También, cree que el enjuiciamiento del exgobernante “es un mensaje fuerte para la clase política” pero duda que tomen lecciones de la misma. “No quieren entender que no pueden hacer las cosas a la brava”. Sánchez es del criterio, además, que el tratado de extradición debe reformarse para que haya reciprocidad entre los dos países, pues, hasta el momento, solo Honduras extradita a los connacionales, mientras los Estados Unidos se hace de la vista gorda en casos como el de Axel López, uno de los grandes estafadores de los Hospitales Móviles o el asesino de las tres mujeres en Roatán, recientemente, que sigue refugiado en Estados Unidos.

“NO DEBERÍAN SENTIRSE SEGUROS”

Contrario a lo anterior, el exagente de la DEA, Max Vijil, que ha seguido de cerca todo el caso, sostiene que los políticos mencionados “no deberían sentirse seguros” porque la conspiración del exgobernante es más amplia y es seguro que los Estados Unidos está trabajando para formalizar nuevos pedidos de extradición.

“Lo que yo he visto es que hace tiempo el narcotráfico se ha normalizado en Honduras. Las campañas cuestan hasta 400 millones de lempiras y solo los puede pagar los narcos a cambio de protección, porque así funcionan los carteles, con protección”, señaló.

Tanto Sánchez como Vijil coinciden en algo: que el tráfico de droga sigue en Honduras con nuevos cabecillas y nuevos socios, si no es con los mismos mencionados en Nueva York que ahora están en el poder.

“Es utópico pensar que el tráfico se va a detener”, dice Sánchez. “Los cabecillas son reemplazados fácilmente y siempre habrá alguien que los van a comenzar a proteger”, subrayó Vijil.

Hay una historia que ilustra, mejor, lo dicho por estos analistas. Sucedió en las montañas de Sinaloa, México, cuna del cartel del mismo nombre, cuando el periodista mexicano Julio Scherer le preguntó a Ismael “El Mayo” Zambada, -líder del cartel de ese mismo nombre- en la única entrevista y la única foto que existe de él, en casi 70 años activo en el narco sin pisar nunca la cárcel- si un día lo atrapaba o se entregaba.

–Un día decido entregarme al gobierno para que me fusile. Mi caso debe ser ejemplar, un escarmiento para todos. Me fusilan y estalla la euforia. Pero al cabo de los días vamos sabiendo que nada cambió.

–¿Nada, caído el capo? –El problema del narco envuelve a millones. ¿Cómo dominarlos? En cuanto a los capos, encerrados, muertos o extraditados, sus reemplazos ya andan por ahí. –El narco está en la sociedad, arraigado como la corrupción. (EG)

¿Qué pasará con las extradiciones?

• Gonzalo Sánchez analista

“No quiero que me tergiversen lo que digo en cuanto al autoacordado, mi opinión, es que debe reformarse conservando el principio de reciprocidad y que las penas deben ser iguales a las que existen en Honduras porque el delito se cometio en Honduras, siempre y cuando se prueben. Aunque suene raro, no es correcto que Honduras esté extraditando a los hondureños solo porque lo pide Estados Unidos, para mí lo que debe hacerse es que vengan los fiscales de Estados Unidos con las evidencias, la prueba material y científica a probar las razones por los pedidos de extradicion”.

• Mike Vijil, exagente de la DEA

“Yo espero que van a ver acusaciones formales, más solicitudes de extradición, la única cosa preocupante es que después de que salieron varios nombres en el juicio de JOH los politicos que están vinculados van a tratar de dañar el tratado de extradición o tomar medidas para evitarlas, ya muchos están hablando de eso. Espero que se investigue a los mencionados, como dijo el fiscal de Honduras, o no sea solo una táctica para decir, cuando venga una solicitud de extradición decir que nosotros los estamos buscando porque se sabe muy bien que para buscar estos individuos se necesita una reforma muy grande”.