Novios mueren arrollados por “bolo” al volante

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20 de marzo de 2024
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10:20 pm
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Novios mueren arrollados por “bolo” al volante

En su desenfrenada marcha el conductor de este vehículo atropelló a un tercer motociclista que actualmente se debate entre la vida y la muerte en un centro asistencial.

Un sujeto en completo estado de ebriedad provocó una nueva tragedia en las carreteras que dan acceso a la capital, al provocarle la muerte con su automóvil a un joven y una muchacha que se transportaban en una motocicleta.

Las víctimas fueron identificadas como Erika Fabiola Betancourt (24) y Nelson Enrique Barahona (23), quienes se conducían en una “moto” desde el centro capitalino hacia su hogar en la aldea Santa Rosa, la noche del martes.

Del jovencito se supo que era trabajador de una estación gasolinera y un apasionado de las motocicletas.

Autoridades policiales indicaron que el trágico accidente ocurrió en el kilómetro 2 de la carretera que de la capital comunica con la zona sur del país.

Nelson Enrique Barahona y su novia Erika Fabiola Betancourt fueron asistidos por otras personas, pero ya no presentaban signos vitales por los golpes sufridos.

La pareja se trasladaba en la “moto”, pero en un tramo del eje carretero fueron arrollados por un vehículo tipo pick-up, color gris, que invadió el carril contrario e impactó de frente contra la motocicleta.

En el acto murieron los dos motociclistas, pese a que varias personas les intentaron dar los primeros auxilios. Ambos cuerpos quedaron a un lado de la destruida motocicleta tras el brutal impacto.

Por su parte, el conductor del automotor fue retenido por otras personas, por varios minutos y de acuerdo con varios testigos estuvo a punto de ser linchado por los vecinos de la zona.

Para evitar mayores problemas, agentes de la Policía Nacional desplazaron al causante de la tragedia a una posta policial. Luego se supo que el conductor “bolo” era pariente cercano de un fiscal del Ministerio Público (MP).

Visiblemente ebrio, el motorista involucrado en el accidente solo repetía: “Yo no los maté, no están muertos, verdad”.

La noche del martes, los cuerpos de las víctimas fueron trasladados hacia Medicina Forense, mientras que el conductor del automóvil fue remitido horas después hacia la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).

En esas instalaciones policiales se le tomó su declaración de lo sucedido y se le realizaron pruebas toxicológicas para determinar el grado de alcoholismo en que conducía su vehículo por la salida sur de la capital. (JGZ)

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