Un lujo comida frita por alzas de precio al aceite y los frijoles
En estas presentaciones improvisadas de bolsas plásticas y en envases de refrescos, en hogares pobres compran aceite vegetal, lo más barato en insumos para su alimentación.
En hogares hondureños de escasos recursos económicos donde acostumbran a comer frijoles fritos, sentirán un fuerte impacto en sus bolsillos, debido al encarecimiento de la libra de aceite vegetal pesado y de la medida de frijoles.
La voz de alerta fue emitida desde el capitalino mercado San Pablo en Tegucigalpa por la comerciante Ana García. “Ninguno de nuestros proveedores ha venido a dejarnos aceite en bidones desde la Semana Santa, serían ya dos semanas 15 días que no nos han abastecido”. García lamentó que “no tenemos información específica sobre lo que está sucediendo con lo que es el aceite pesado”.
Con esta problemática sale perdiendo el comprador final pues al reportarse esa escasez, los distribuidores aprovechan a inflar los precios. “Fui a buscar aceite al mercado Zonal Belén o Mayoreo y solo logré conseguir 5 bidones. Antes el precio oscilaba entre 580 y 590 lempiras, ahorita se compra hasta a 900 lempiras, yo logré comprar en 780 lempiras” reveló.
Las jefas de familia de hogares pobres compran este insumo de cocina pesado en presentaciones improvisadas de bolsas plásticas y en envases de refrescos por ser una de sus opciones más baratas, después de la manteca pesada.
La administradora de la pequeña tienda de abarrotería en ese populoso mercado San Pablo recordó que, en el último comportamiento, la libra de aceite costaba 18 lempiras. Luego se dio un incremento a 22 lempiras y en este momento, se disparó a 27 lempiras.
“Son nueve lempiras de incremento por la libra de aceite, de 18 pasó 27 lempiras. Estamos en espera para ver si alguno de nuestros proveedores viene para abastecernos, aunque sea algo”, confió Ana García.
GRANOS BÁSICOS
La situación económica de los más pobres también se complicó desde este pasado fin de semana en el caso de la medida de frijol rosado (cinco libras) que se cotizaba desde 110 hasta 115 lempiras rosado y actualmente, los abarroteros lo están comprando por mayor a 120 lempiras la medida, una diferencia de 5 lempiras la medida y hasta diez lempiras al consumidor final.
Para Santos Reyes, pulpero de la colonia Cerro Grande, esta tendencia alcista no debería causar sorpresa, según él porque la comercialización de frijol inicia un proceso cíclico anual de alzas, al igual que el precio de los diferentes granos básicos.
“Es un fenómeno que se presenta siempre y se extiende hasta junio y julio, pues es un período cuando no hay producción nacional” explicó Reyes.
Mientras, los campesinos claman para que este año el invierno no se atrase y se puede cultivar a inicios de mayo próximo (ciclo de primera), de lo contrario implicaría también un atraso en las siembras, llevando a cosechas un poco más tarde, es decir, entre la segunda quincena de agosto y septiembre.
Adicionalmente, la escasez de dólares “abona” con pronósticos adversos en el área de seguridad alimentaria, advirtió el director ejecutivo de la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (Fenagh), José Chacón.
“No contar con dólares complica el proceso de la importación de equipo e insumos que necesitan en diferentes actividades del aparato productivo, entre estos, fertilizantes y abonos para las cosechas de primera que arrancan en las próximas semanas”. (WH)
DATOS
Personal del Banco Central de Honduras (BCH) reconocieron que en marzo los rubros que determinaron el resultado inflacionario fueron: “Alimentos y
Bebidas no Alcohólicas” y “Transporte” con 0.16 puntos porcentuales (pp) cada uno y “alojamiento, agua, electricidad, gas y otros Combustibles” con 0.08 pp, explicando aproximadamente el 82.0% de la inflación del mes.
Es así que, la inflación acumulada en lo transcurrido en el primer trimestre del 2024 ya alcanzó un 1.41 por ciento, aunque desde el BCH aseguraron que “fue la más baja de los últimos tres años”. Sin embargo, en hogares pobres resienten la realidad con alzas al costo de la canasta básica, atribuidas por comerciantes a un “rosario” de argumentos, que van desde el ajuste al salario, alto costo de la gasolina, escasez de dólares y el coyotaje, entre otros. Para cierre de este año la inflación no pasaría de un 5 por ciento, significa que el pueblo enfrenta ya el 28.2 por ciento de impacto de esa meta contemplada en el Programa Monetario 2024-2025.
