¡Un vistazo al infierno de luz infinita!

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23 de mayo de 2024
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12:01 am
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¡Un vistazo al infierno de luz infinita!

Por: Lic. Gustavo Adolfo Milla Bermúdez

Con el “TRAGOR” de mis letras empuño mi pluma para quedar esculpido en la roca ante la historia como los Mayas, los Incas y los Toltecas. El mundo de la literatura es una piedra angular diamantina para los intelectuales que soñamos y nos inspira, a través de la prosa y la poesía como la lira melodiosa y la filosofía es la vibración de nuestra fuerza motora, como torbellino de nuestros sentimientos y pensamientos de nuestra concepción humana. Y poder viajar hacia lugares quizás ignotos donde se encuentran la razón y la lógica a través de la luz infinita, para poder ver a la sociedad en pleno movimiento buscando el camino de la verdad como su propio destino, quizás la luz eterna, quizás su propio planeta.

Alguien me preguntó qué hacía solo en la montaña del olvido. Yo le contesté que solo le echaba un “Vistazo al infierno de luz infinita” donde hay un holocausto y se oye un clamor de dolor y una brisa tenebrosa entre los arboles del bosque como susurro de un torbellino que me arrebata el pensamiento de lo que puede ser un amanecer en el ocaso con mis sufrimientos que me ahogan el corazón de dolor.

Más allá del “Bien y el Mal”, trato que no me confundan con otros, porque no todos padecemos del mismo mal que nos agobia; pero tampoco yo no tengo porque confundirme con otros que no son de mi estirpe y abolengo. Con humildad se los digo, no vengo del vulgo, ni de pasiones ocultas, pues ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo. Yo me paro a la borde más pavoroso de los Alpes Andinos y veo que vuelan las águilas y los cóndor planificando los páramos más fríos de la india Ecuatorial.

Mi vida no es una diáfana sombra o como un rayo de luz fugaz y, mucho menos una diáfana figura de abstractos conceptos filosóficos; soy la realidad, cuerpo, espíritu y alma. Soy forjado bajo el fuego de mis pasiones y ambiciones, un hombre formado con criterio propio y navego en ríos limpios, no viajo en mares turbulentos ni en lagos sucios; mi alma es como la nieve blanca, puro como los rayos del sol y fuerte como un volcán en plena erupción.

Los valores inexistentes y caudales que afecten nuestros sentimientos, que los arrastra un viento confundido se escucha y produce la ilusión de una acústica de creer de donde viene y donde nace, que se oye como el caudal de un río o un volcán en plena erupción.

Hay una estrofa cautelosa fundida en la indolencia que revela y expresa el martirologio del “Bien y del Mal”. No dejes que te absorban los malos sentimientos, tu alma es limpia porque tu corazón es puro como el amor que Dios te ha dado, blanco como la nieve y puro como el sol que penetra hasta los muladares y sigue siendo el “Sol”.

¡Miremos y contemplemos el bosque y oigamos el trinar de los pájaros con dulce canto que alegra nuestros corazones, y la musa de la prosa y la poesía con delirio de amor, como el de “Romeo y Julieta” que la humanidad no los olvida jamás!

Con tu dardo de fuego pasional, has roto el hielo de mi corazón y de mi alma. Para que ahora esta estrepitosa melodía de amor vaya al mar de sus esperanzas sin fe, suma cada vez más clara y luminosa; libre a pesar de un deber tan amoroso. Asi mi alma ensalza tus prodigios, de corazón bondadoso, hermosísimos-sentimientos como un torbellino de amor. “Eres mi fuego pasional”.

E-mail: [email protected]

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