ESTADÍSTICA BRUTAL: DE CADA 10 OBESOS EN EL D.C., 7 SON MUJERES

Salvo que la obesidad se produzca por desajustes hormonales u otras patologías, cuya corrección no esté al alcance de la persona que la padece, me parece altamente preocupante que nuestras féminas tengan esa mayoría nada halagüeña, en la situación de obesidad de nuestra población.

Si nos descuidamos y provocamos la obesidad en nuestros cuerpos por negligencia o malos hábitos alimenticios, estamos anunciando una muerte por suicidio, que ocurrirá más temprano que tarde.

Hasta debería ser objeto de una sanción penal que, en todo caso, podría ser preferible a esta de muerte auto provocada. Creo que Dios nos hizo acompañar con una especie de su bella creación, al disponer que el hombre no debía estar solo en su vida.

¿Cómo puede una dama, pudiendo evitarlo, acumular libras en exceso y permitir que su cuerpo se deforme por no llevar un correcto régimen alimenticio y no practicar algún deporte o ejercicio físico?

A mí me parece, que además de ser atentatorio para la vida de esas personas, constituye una falta de consideración para el resto de las personas que debemos someternos a semejante sufrimiento visual y atentatorio al buen gusto.

El año pasado, falleció en Colombia el célebre pintor FERNANDO BOTERO, que se especializó en resaltar las formas esféricas y voluptuosas en los personajes de sus cuadros y esculturas, por una concepción de carácter estético, pero también como una crítica a ese mal, que parece ser predominante en nuestro continente.

No es posible que esta situación siga en total impunidad. A cuidarse féminas de nuestro país. ¡Dicho con todo cariño y respeto!

Tegucigalpa, M.D.C., 25 de mayo de 2024