Hondureño estaría entre implicados en fallida operación en Venezuela
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, muestra documentos de dos estadounidenses detenidos.
Las autoridades venezolanas buscan a un hondureño que participó en la fallida y disparatada operación “Gedeón”, que pretendía secuestrar, al mejor estilo de las películas de “Rambo”, al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para entregarlo a la justicia estadounidense.
De acuerdo con una investigación de diario El PAÍS de España sobre el rocambolesco plan del pasado 3 de mayo, el hondureño habría tenido participación como asistente del “cerebro” del operativo: Jordan Goudreau, exmiembro de las Fuerzas Especiales de Estados Unidos, veterano de Irak y Afganistán y hoy representante de la firma de seguridad privada Silvercorp, con sede en Florida.
Además del hondureño, el exboina verde se hacía acompañar de un estadounidense, un puertorriqueño, y un mexicano. Todos ellos se instalaron en Cúcuta, fronteriza con Venezuela para dirigir desde allí la operación.
AÑO DE PLANIFICACIÓN
El reportaje brinda los pormenores del complot contra el número uno del “chavismo”, que se gestó desde febrero del 2019 con el visto bueno del líder opositor venezolano, Juan Guaidó, asesorado por el controvertido consultor político, Juan José Rendón, más conocido como JJ, exasesor de varias campañas del Partido Nacional en Honduras.
Incluso, tras el fracaso de la operación, el venezolano Rendón, enemigo público del “chavismo”, aseguró a CNN que él mismo firmó el contrato con el mercenario estadounidense y desmarcó en todo momento del operativo a Guaidó, quien también lo negó.
El excombatiente de Irak y Afganistán, al que Maduro calificó en algún momento como “Rambo”, habría cobrado por la operación unos tres millones de dólares, más el apoyo del general disidente Clíver Alcalá, quien en tiempos de Hugo Chávez había comandado la región donde se llevaría a cabo la incursión a territorio venezolano.
Meses más tarde, Alcalá fue acusado de narcotráfico por Estados Unidos y se entregó a la Agencia Antidrogas DEA, pero esto no evitó que Goudreau desistiera del plan y, al fin y al cabo, otros
exoficiales, ligados a Guaidó, asumieron el puesto del famoso general encarcelado, se informó.
COMANDO DE ASALTO
Conforme al plan, un comando de 300 combatientes, coordinados desde Colombia por el mercenario de la Florida, desembarcaría en dos playas, a 30 kilómetros de Caracas, asaltarían el aeropuerto internacional de la ciudad, secuestrarían al gobernante y lo subiría en un avión rumbo a Estados Unidos.
En algún momento, los financistas del operativo espetaron al estadounidense por el uso de tan pocos hombres frente a la magnitud de la operación, pero este les respondió que cada uno de sus soldados equivalía a 500 combatientes venezolanos.
Sin embargo, al momento de la acción solo participaron 70 hombres armados con fusiles y pistolas, 12 de los cuales murieron en el acto. El resto, exoficiales venezolanos y dos mercenarios estadounidenses, fueron arrestados a bordo de unas lanchas rápidas sin haber tocado playa, debido a que las inteligencias venezolanas habían infiltrado el plan desde hace muchos meses, según las fuentes de El País.
Incluso, desde enero del 2009, las fuerzas especiales venezolanas allanaron viviendas y hoteles de las playas donde Goudreau y Alcalá pensaban desembarcar, pero el famoso “Rambo” había huido con sus ayudantes, entre ellos el hondureño, que ahora es buscado por la justicia venezolana, aunque su identidad y paradero se desconocen.
POR QUÉ FRACASÓ
Un antiguo militar le contó a El País el por qué es difícil derrocar al “chavismo”: “En Venezuela todas las conspiraciones han fracasado por cinco razones:
porque hay un poco de mitómanos, gente que te dice que tiene 50 batallones dispuestos a intervenir y no es verdad; porque hay un montón de ilusos, gente que piensa que si ellos dan un paso muchos los van a seguir; porque hay estafadores, gente que ha hecho de la necesidad de restituir la democracia en Venezuela un negocio; la cuarta son los ignorantes, gente que no sabe de artes y ciencia militares; y la última son los locos, con componentes de vanidad y de ego”.
Por su parte, las autoridades colombianas, que han quedado mal paradas al negar haber estado al tanto de la operación, investigan, al menos, dar con el paradero de la ruta del dinero que pudo haber recibido el “Rambo” moderno, pues no dudan que, a través de testaferros, le siguió llegando financiación para la operación fallida.
(leer el reportaje completo en https://elpais.com/internacional/2020-05-16/mitos-egos-y-torpeza-anatomia-de-un-complot-disparatado-en-venezuela.html)
Noticias Relacionadas: Embajador Claudio Sandoval: 100% de aviones que aterrizan con droga en Honduras provienen de Venezuela
