El COVID-19: tiempo para superar debilidades y unirnos

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20 de junio de 2020
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12:02 am
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El COVID-19:  tiempo para superar debilidades y unirnos

El COVID-19: tiempo para superar debilidades y unirnos, Adán Hilario Suazo Molina
Coronel de Aviación ®

Las cosas parecen cada vez más complicadas, un par de días practicando pruebas sobre las 1,000 PCR, han disparado las estadísticas, sin embargo esto no modifica la actitud incrédula del pueblo, pero acorrala más a las autoridades, aturdidas por denuncias, amenazas y tumultos, que entorpecen cualquier acción o intención.
En esta mezcla de intereses, política e ignorancia, hay que destacar elementos esenciales que mueven la actitud y comportamiento humano en el mundo, estas son las redes sociales y los medios de comunicación. Siendo el producto más nocivo las noticias falsas (fakes) y el exagerado amarillismo. Pero esto es una realidad, que al igual que el COVID-19, hay que aprender a vivir con él. Por ahí en las redes aparece un mensaje que afirma: “lo que afrontamos, es el peligro más grave que los humanos hemos experimentado, desde que el hombre apareció en el planeta”, ¡de eso no hay duda!, pero aceptémoslo, esto no es más que una trampa que nosotros mismos hemos construido, producto de la despiadada carrera por el dominio, la codicia y sobre explotación de recursos, olvidando valores elementales, pero en particular, la responsabilidad de todos con esta nave que se llama TIERRA o la Casa Común como la denomina el Santo Padre; obviando el más simple pero elemental principio social, el cual es conviviir.

Con interés particular en nuestra amada patria Honduras, aceptemos que la mortal amenaza, nos ha atrapado y acorralado en una maraña de dificultades, intrigas, dudas, etc. Dicho panorama, nos hace postergar más una solución o encausamiento para controlar el problema. Muchos fundamentos de supervivencia deben cumplirse, con el mundo entero ocupado en su propio problema, se debe afrontar con lo que se pueda y se tenga. Los procesos de emergencia, asignaciones y compras, han sido denunciados por corrupción, no hay ninguna excusa, si hay dolo debe penalizarse, si no hay debe aclararse. Lo que se libra en el mundo, es lo más parecido a una guerra global, por lo tanto las acciones y omisiones son de supervivencia. Quien no ayuda, que no estorbe.

Convencidos estamos de la labor que desarrolla el personal de Salud, a quienes muchos llaman con justicia héroes, es algo digno y ejemplar; son ellos quienes enfrentan cara a cara el peligro y se exponen a las consecuencias, varios han fallecido en esta lucha, otros se han infectado, la presión, el agotamiento físico y mental debe ser algo inimaginable y la situación se complica. Al reconocer la miserable realidad del sistema de sanidad del país; naturalmente en ellos surgen dudas, estrés, temor y frustraciones. No obstante, aun reconociendo esta situación, nos obliga a preguntarnos, sobre la actitud de algunos médicos: ¿qué beneficio trae al pueblo, grabar un mensaje, reclamando sobre falta de insumos en los hospitales?, ¿qué beneficio trae al pueblo, anunciar que ya los hospitales están al tope de su capacidad?, ¿qué beneficio trae al pueblo escribir mensajes desprestigiando al gobierno, por ineptitud en la gestión de la pandemia? Con seguridad, obtener un desahogo, insultar o desprestigiar al gobierno y un efecto político, de eso no hay duda. Pero: ¿efecto positivo hacia el pueblo? Antes bien desorienta y aterroriza, quizá si un compatriota enferma, se preguntará: ¿para qué acudir a los hospitales si están al tope o no hay insumos?, recordemos, los tales mensajes corren y retumban en las redes y medios, a velocidad vertiginosa, el morbo y la primicia sobre todo.

El derecho a la protesta y al reclamo lo tenemos todos, pero que sea del lado y en beneficio del pueblo, lo reitero, no tratamos de defender o apañar a nadie, pero por qué no mediar una tregua o espacio de unidad, sabemos que contamos con recursos intelectuales valiosos en y fuera del país, siempre estamos a tiempo de anteponer los sagrados intereses de la patria a las mezquindades mundanas. Cualquier acusación, duda o sesgo puede ser definido, aclarado o ejecutado después de superar y controlar el enemigo común, cual es el COVID-19.

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