Tránsito de Cirilo Nelson, gloria de Honduras

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27 de febrero de 2021
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12:31 am
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Tránsito de Cirilo Nelson, gloria de Honduras

Por: Víctor Manuel Ramos

Cirilo Nelson.

Durante los meses de este fatídico año del 2020, estuve al tanto de los mensajes del Facebook que el doctor Cirilo Nelson (Cyril Hardy Nelson Sutherland) enviaba desde su residencia en Alcalá de Henares, un sitio cervantino. Había en ellos mucha sabiduría, mucho elemento ilustrativo de su trabajo y de exaltación de nuestros bienes naturales. Una página para aprender. Nos hizo una serie de entregas sobre los maravillosos peces que navegan en las aguas cristalinas de Roatán con fotografías de Mau Riquelme, una importante selección de plantas que crecen en nuestros valles, serranías y montañas; nos ilustró con las imágenes desgarradoras que se publicaron en el libro El descubrimiento de América de Théodore Bry, imágenes que nos iluminan la conciencia sobre la crueldad y criminalidad con que procedieron los conquistadores en contra de los aborígenes de América. Estaba completamente activo y lúcido. También participó del proceso de las elecciones en Los Estados Unidos de Norte América. Uno de sus comentarios fue:

“Hay un candidato que está más loco que una cabra, que carece de savoir faire”. En su página me enteré que el abuelo de Trump era un proxeneta que regenteó un lenocinio durante la fiebre del oro en California. De tal palo tal astilla. Sobre la inmadurez gubernamental de irrespeto a la figura máxima de nuestra historia, con eso del feriado Morazánico, comentó: “Se fueron los meses morazánicos y Morazán se llevó consigo a la tumba su amor a Centroamérica”. Pues parece que los hondureños permanecemos indiferentes al legado incalculable que nos dejó el héroe de muchas batallas en pro del respeto a la Constitución y a los derechos de los centroamericanos. Con un pequeño dúo de oraciones nos hizo ver su fe republicana: “En las repúblicas se es ciudadano, en las monarquías, súbdito”. Lucía en su página como un hombre con gran transparencia mental. No había cabida para pensar que le acechaba la muerte, de que estaba mortalmente herido por el cáncer. En sus últimas publicaciones nos fue deshojando los versos de la Elegía a la muerte de su padre de Jorge Manrique: “así que no hay cosa fuerte;/ que a Papas, Emperadores/ y Perlados/ así los trata la muerte,/ como a los pobres pastores/ de ganados”. Y, como para que nadie olvidara, nos mostró sus diplomas, nos hizo recordar los honores recibidos, la lista de sus publicaciones en revistas y sus libros. Además nos mostró fotografías suyas en muchísimos lugares del mundo que conoció y de la compañía con sus amigos.

En agosto doné a la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán unas plantas para adornar la Plaza Cuba que está cercana a su campus y que han tomado como su responsabilidad darle mantenimiento. Entre esas plantas había dos palmeras que no lograba identificar. El 22 de julio le envié un mensaje para pedirle ayuda. Me contestó que estaba hospitalizado por unos días pero que me daría respuesta. Y la respuesta vino unas semanas después. No imaginé cuan enfermo estaba. Él era un experto botánico taxónomo.

Pero lo que más revuelo causó, de su página o muro como se dice ahora, fueron sus preguntas sobre temas de la existencia de Dios y sobre la creación y otros asuntos de la Biblia. Provocó un verdadero vendaval de respuestas, incluso algunas irrespetuosas que le reclamaban respeto aunque no había en tales cuestionamientos ninguna falta de respeto. Me pregunto yo ¿por qué para los creyentes es una falta de respeto que un no creyente se refiera, conforme a sus ideas, a las creencias religiosas? ¿Por qué solo los creyentes tienen derecho a exponer sus ideas y a los no creyentes se les niega ese derecho y su opinión es tomada como un irrespeto? Las dudas y las preguntas fueron magníficamente formuladas de tal manera que yo pensé que en las preguntas y las respuestas a esos cuestionamientos del Dr. Cirilo Nelson, como librepensador, había para escribir un libro. Su última publicación apareció el 19 de diciembre del 2020 para mostrarnos las bellas imágenes del hongo amanita muscaria también conocido como matamosca o falsa oronja. Tras pasar la Navidad falleció el 26 de diciembre de este 2020. Había nacido en La Ceiba el 30 de julio de 1938.

Conocí al profesor Cirilo Nelson en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH). El laboraba en el Departamento de Biología y yo en el de Ciencias Morfológicas. Nos hicimos amigos y establecimos una buena relación. Guardo en mi biblioteca muchos de sus libros. Entonces él estaba casado con la profesora Norma Funes quien me había dado clase de Matemáticas en el Centro Universitario de Estudios Generales de la UNAH. Siempre estuve al tanto de sus trabajos de investigación taxonómica de las plantas de Honduras, de sus hallazgos de plantas no clasificadas, de su afán que le lleva a la fundación del Herbario de la Universidad que lleva su nombre: Cyril Hardy Nelson Sutherland.

Su trabajo está recogido en varios libros publicados, algunos, por la Universidad: Catálogo de plantas vasculares de Honduras (2008), Nociones fundamentales de Anatomía Vegetal (1994), Biología General I y II (1986 y 1987), Plantas Comunes en Honduras (1986), Nociones de Taxonomía Vegetal (1982), Ciencias Naturales (1979), Nociones de latín para estudiantes de Taxonomía (1976). Las plantas siguientes le han sido dedicadas

Obtuvo el grado de profesor de Enseñanza Media en la Escuela Superior del Profesorado Francisco Morazán (Tegucigalpa) y una maestría en la Universidad de Colorado (1965) y fue distinguido con el Premio Nacional de Ciencia José Cecilio del Valle ((1987), como profesor Emérito de la Escuela Superior del Profesorado Francisco Morazán, el Doctorado Honoris Causa por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (1985) y el Premio de investigación científica de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras. Pero el honor más grande y perdurable fue el que muchas plantas, por él descubiertas, lleven su nombre. [ ] Fue él quien bautizó a la Orquídea que es la Flor Nacional de Honduras: Rhyncholalia digbyana.

Ha fallecido en España. No veo interés por parte del Estado de repatriar sus restos. La nación debería tener ya un Panteón para sus grandes luminarias, por supuesto que ahí no cabrían los tiranos y dictadores, los golpistas y los corruptos y traidores a la patria y otros acusados de graves faltas. Por ahora no habrá una calle o una plaza en donde se levante un monumento en su honra. Esos lugares no están designados para los Tiburcio Carías, los Leonardo Callejas, los Manuel Bonilla, los Juan Manuel Gálvez, y otros bichos insanos.

Cyril Hardy Nelson Sutherland: Su nombre a engrandecido a Honduras.

Tegucigalpa, 1 de enero de 2021.

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