Cine Variedades: 11 años de haber cerrado sus taquillas
El legendario cine Variedades en el 2010, días después de su cierre.
¡HOLA, HOLA! Amables y files lectores donde se encuentren. Otra semana de altos y bajos con todo lo que está sucediendo. Con expectativa, a las puertas de otro proceso electoral -el próximo 28 de noviembre- en nuestro país.
Deseamos que todo sea una fiesta cívica, de altura. Que los políticos y activistas la desarrollen en paz y respeto a los resultados.
El pueblo hondureño merece esa paz y tranquilidad para los que trabajamos honestamente. Reponernos de los estragos económicos derivados de esta maldita pandemia y los desastres naturales que nos azotaron.
Para un RELAX, nuevamente estas líneas…
SE FUE
Estas nuevas generaciones quizá no supieron de cine Variedades. Pero en los que ya peinan canas, queda en el recuerdo sus experiencias con el séptimo arte en la capital. Vividas en sus salas en tiempos de juventud.
Como aquí casi todo se olvida -menos a nosotros- hoy les revivimos a ese referente. A 11 años de haber cerrado sus puertas.
Con esta clausura de funciones, también finalizaba otra etapa evolutiva en el negocio del cine en nuestro país. De los muchos que quedaban en el centro de la capital y cercana periferia, ya no están.
La época moderna y su tecnología trasladaron al usuario a los malls, que aportaban más comodidades. Pero como todo tiene un comienzo y un final, aquí estamos para contártelo. Y quedar también grabado en nuestra historia.
La primera función de gala de cine Variedades causó tremenda expectativa. Corría la primera mitad del siglo pasado. La asistencia en ese entonces fue enorme, las butacas estaban llenas.
Pero fue un 14 de septiembre del 2010 que marcó su fecha de cierre. Pocas personas entraron a la última función de esa noche, de 6:30 a 8:30. Lejos estaban de imaginar que serían los últimos clientes.
Ya podrán contar que personalmente asistieron al sepelio de una leyenda en el mundo del entretenimiento cinéfilo capitalino: Cine Variedades.
Ya el 15 de septiembre -que era el día en que se tenía planeado cerrar- esas butacas no acogerían a nadie más. Para siempre…
INICIOS
En la primera veintena del siglo XX, a Eduardo Berlioz, de Comayagua, se le atribuye ser de los primeros en haber encendido el foquito de la industria cinematográfica en Honduras. Este pionero y visionario empresario empezó a exhibir películas mudas en varios rincones del suelo patrio.
Dícese que fue el fundador de cine Pálace y el creativo para que don Alberto Lazarus abriera el “Teatro Variedades”. Aseguran fuentes -sin lograr precisar- que eso fue en 1914.
Ya para 1930 la recordada dama doña Enriqueta de Lazarus tomó el mando del cinema hasta su último día de vida. Le impregnó modernismo de la época y se dieron los más grandes taquillazos que se registra la historia del séptimo arte aquí en nuestro suelo.
En los setentas, siendo ella presidente del Consejo de Administración, nombró como gerente a don Alejandro Valladares (exembajador de Honduras ante el Vaticano, ya fallecido) quien le dio impulso y categoría.
Don Antonio Rock, gran conocedor y empresario de este rubro desde hace muchos años, nos dijo en su oportunidad que fue doña Queta quien construyó el cine en ese lugar y que su primer gerente se llamó Ángelo Frattini.
Sobre las posibles causas que incidieron para el cierre del último cinema que quedaba en el centro capitalino refirió que en toda Centroamérica los cinemas del centro de las capitales habían desaparecido.
Preguntado sobre los factores, apuntó que uno de ellos fue la inseguridad que campeaba en el centro (y continúa).
Otras aristas que influyeron fue la salida en ese tiempo de las películas en DVD, la piratería, los videoclubes. A eso se sumó la construcción de los malls. Ahí llegaron también los modernos cinemas.
Y cómo es la evolución. En ese tiempo ni pensar en NETFLIX. Hoy férrea competencia de estas mismas salas de cine en centros comerciales.
EL ÚLTIMO
Como siempre en nuestro medio, ante el cierre se corrieron rumores y chismes baratos como para seguir las tradiciones y leyendas pueblerinas. Se dijo que ahí adentro por las noches salían fantasmas, que muchos los vieron y por eso se alejaron (¡?).
Que al ser remodeladas sus instalaciones ahí operaría una tienda de ropa usada y en su parte alta (donde era palco) funcionaria una iglesia protestante, de las muchas que afloraron en los antiguos cines de la capital.
Nada de eso sucedió. Una tienda de electrodomésticos hoy ocupa el edificio de lo que un día fue cine Variedades. Muchos pasan por aquí y no se dan cuenta de su historia.
Lo que registra la historia hoy contada, es que un 14 de septiembre del 2010 dijo adiós una mítica estancia del esparcimiento cinematográfico con glorioso pasado.
Era el último que quedaba en el centro capitalino después de haber cerrado también el Clámer. Se aferró al pasado, pero no pudo con los cambios que dicta la conducta del consumidor moderno. El adiós de una reliquia con pantalla que se nos fue…
¿Cuántas generaciones se deleitaron con grandes producciones cinematográficas que se exhibieron ahí? ¿Cuántos tortolitos que ahora nos leen, en aquellas butacas sellaron su amor con un beso, teniendo de cómplice la oscuridad y el olor de las palomitas de maíz?
Y…
Y por hoy hasta aquí. Hemos dejado otra HUELLA imborrable en el devenir del negocio del cine en nuestro país. Continuamos sirviéndoles en el pedregoso camino de un ya largo trajinar….
QUE DIOS NOS CUIDE A TODOS.
ÚLTIMAS PELÍCULAS EXHIBIDAS
Curiosamente, hablando de “últimas”. Las últimas cintas exhibidas en cine Variedades fueron: “El último maestro del aire” y “Depredadores”.
EL ÚLTIMO
El último operador que manejó la máquina de proyección hasta el 14 de septiembre y que lo venía haciendo desde hacía muchos años atrás, responde al nombre de Rubén Zelaya a quien fue imposible localizar para saber más de la historia del otrora cinema.
ANTES
En sus comienzos se “vio” algo más que una película. División de salas: visible división de clases sociales: Para los acomodados: Palco, que valía 20 centavos. Para los de clase media: Luneta, 10 centavos. Para los pobretones: Galería o “gallinero” como le llamaban, 5 centavos.
En un tramo de su existencia la luneta valió L1.60 y palco L3.00. Cerró cobrando L40.00 general.
AQUELLOS “BOMBAZOS”
Estrenos cinematográficos que hicieron historia en cine Variedades por su récord de taquilla: “Tiburón”, “El extraterrestre” y “los 10 mandamientos”, entre otros. Sus famosos matinés eran llenos completos.
SE IBA A…
Se iba a estrenar la cinta “Agente Salt” aprovechando el feriado del 15 de septiembre (2010) pero no se pudo. El 14, un día antes, lo cerraron.
HUELLAS
Aquí les envío fotos EXCLUSIVAS e históricas que captó mi lente. Quedan HUELLAS para la historia.
