Ventura Díaz, el refranero de San Vicente Centenario, junto a su esposa.
Roldán Duarte Maradiaga
Inicialmente pensé en referirme a los ‘refranes y piropos hondureños’; sin embargo, como no estoy seguro de la originalidad de los que pretendo incluir en este escrito, preferí usar un nombre genérico, de modo que no aparezca alguien increpándome por falsear la nacionalidad de esas expresiones populares.
Los refranes son dichos agudos y sentenciosos de uso común, que la gente suele utilizar ante la conducta de otras personas, a modo de reflexión, ironía o crítica. Los piropos a su vez, son frases breves mediante las cuales se pondera alguna cualidad de alguien, especialmente al tratarse de mujeres.
¿Se pueden usar los refranes y los piropos de forma no convencional?
Como estimo que es posible, a continuación, realizo un esfuerzo en esa dirección.
Empecemos con “Candil de la calle, oscuridad de la casa”. Se me vino a la mente cuando me enteré de que la Cancillería de Honduras le otorgó una medalla honorífica a Nicolás Maduro. Si Francisco Morazán estuviera vivo, se vería obligado a fusilar a los que sin ningún civismo vulneran su dignidad.
Sigamos con “Gallina que come huevos, aunque le quemen el pico”. No fue suficiente con despilfarrar L56.7 millones en un viaje inútil a Dubái, sino que en el nuevo presupuesto de la República le duplican los fondos a la entidad encargada de los deportes y que inaugura canchas deportivas a costos elevadísimos.
Otro refrán afirma que “El que nace para tamal, del cielo le caen las hojas”.
Se puede asociar con los políticos de la oposición que son denigrados, acosados y perseguidos mediante acciones orquestadas desde el poder.
Y el que dice “El vivo a señas y el tonto a palos”, puede aludir a los votantes que no aprenden y siguen eligiendo a los mismos delincuentes.
Alguien dijo por ahí que Honduras tiene cara de mujer, por lo cual podemos tanto elogiarla como ofenderla usando piropos.
Para el caso, se puede iniciar diciendo “¡Hay qué curvas y yo sin frenos!”, ya que el país parece dirigirse al precipicio no solo por la violencia sino también por la falta de empleo, dólares y medicinas.
El que pregona “Qué cucharota y yo comiendo con los dedos”, se puede vincular tanto con un presupuesto nacional inflado y una canasta básica que anda por las nubes, la cual simplemente no está al alcance del pobre.
De igual manera, el que falsamente dice “Eres la melodía más hermosa que mis oídos han escuchado”, lo enlazaremos con aquello de lograr una chamba bien remunerada en el gobierno, tales como ser representante de Honduras ante el BCIE e incluso del Parlamento Centroamericano, o en su defecto, lograr colocarse de director en la CNBS, BANPROVI y el BCH.
Mientras que al escuchar “Tu voz es como una suave brisa que acaricia mis oídos”, es inevitable pensar en aquello de los doce años de dictadura, y también, la dudosa afirmación que habrá elecciones limpias y que pronto llegará la CICIH.
Para no continuar escribiendo tonterías, cito unos cuantos refranes y piropos empleados a nivel mundial.
1) “El hábito no hace al monje”. La apariencia de una persona no determina quién es.
2) “Una golondrina no hace verano”. Una persona sola no consigue lo mismo que cuando está acompañada.
3) “Poco a poco, se anda lejos”. Yendo despacio en la vida es como se afianzan los logros.
4) “Haz bien y no mires a quién”. Hacer el bien por el mundo repercute en nosotros.
5) “El que a hierro mata, a hierro muere”. Cuando nos portamos mal con alguien, podemos recibir de nuestra misma medicina.
Entre los piropos más bellos en todo el orbe están los siguientes:
1) Si un día olvido lo hermosa que eres, ayúdame a recordarlo con la luz de tu sonrisa y el sabor de tus labios.
2) Con esos ojos mirándome, ya no me hace falta la luz del sol.
3) Por la luna daría un beso, daría todo por el sol, pero por la luz de tu mirada, doy mi vida y corazón.
4) Eres la canción que hace sonar mi guitarra.
5) En el día brilla el sol, en la noche brilla la luna y en el centro de mi corazón, brillas tú.
Espero que este pequeño recorrido por algunos refranes y piropos, nos haga reflexionar acerca de la dura realidad hondureña y la belleza de expresar cosas bonitas a las personas que amamos. En el peor de los casos, deseo que los mismos hayan servido para entretenerse y divertirse un poco.
(29 de enero del 2024)
