El acceso a la educación, un derecho universal

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5 de febrero de 2020
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08:03 am
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El acceso a la educación, un derecho universal

Por: Alexa Jannelle Madrid Cálix
Estudiante de la Licenciatura de Relaciones Internacionales
[email protected]
UNITEC, campus Tegucigalpa

La educación es un pilar importante para el desarrollo humano. Al pensar en educación tendemos a asociar nuestros pensamientos directamente al aprendizaje de leer o escribir, sin embargo, su objetivo va mucho más allá de este conocimiento primario. El rol de la educación en la sociedad, y en la vida de los individuos es fundamental, ya que esta viene a forjar el carácter, cultivar la personalidad y otorgar las herramientas de razonamiento para que las personas puedan preparar su futuro.

La Agenda Mundial de Educación 2030, promovida por la UNESCO, hace énfasis en la obligación que tienen los estados de garantizar una educación obligatoria, de promover así la igualdad de oportunidades educativas para sus ciudadanos. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), ha lanzado recientemente una campaña llamada “Derecho a la Educación” que hace un llamado a los estados para que estos ratifiquen la Convención relativa a la Lucha contra las Discriminaciones en la Esfera de la Enseñanza. Dicho convenio expresa los principios esenciales para poder proveer igualdad de oportunidades, y garantizar el acceso a la educación. De igual forma, dicha educación debe de aspirar a estándares de calidad para poder lograr el entero desarrollo del individuo.

Según la CEPAL, al 2017 solo el 44% de los hondureños tienen acceso a educación secundaria, y aunque el acceso a la educación primaria es mayor, todavía existe un 20% que no recibe ningún tipo de educación formal. No obstante, la problemática no solo se reserva al acceso que tienen las personas a recibir educación, también al costo y la calidad de esta es un factor de preocupación en la temática. El poder adquisitivo de cada familia es distinto, por lo cual ciertos sectores se ven limitados al acceso de educación.

Se ha vuelto común ver en nuestro país el surgimiento de gran cantidad de establecimientos educativos privados que vienen a compensar las carencias que tiene el sistema educativo público, dando la oportunidad a aquellos que pueden costearlo, de acceder a esferas educativas totalmente diferentes que las que tienen aquellas personas que no pueden permitírselo.

Si analizamos las diferencias entre los países donde el acceso de sus individuos a una educación de calidad es garantizado, en relación con los países donde no se tiene acceso universal a una educación formal, encontramos desigualdades abismales. Las sociedades estudiadas suelen tener un razonamiento más agudo en cuanto a los sucesos sociales, y son a su vez más democráticas. En cambio, las sociedades que no tienen fácil acceso a educación tienen más dificultades para desarrollar un pensamiento crítico que les permita analizar el ambiente que les rodea. Estas sociedades suelen ser poco democráticas y más cerradas a los cambios.

El estado debe estar completamente comprometido con la educación, ya que es esta la que le otorgará los recursos necesarios para alcanzar un desarrollo integral. La exclusión y las múltiples barreras que presenta el sistema educativo hondureño en la actualidad, impide que el entorno de aprendizaje sea ideal para el respeto de las diferentes necesidades y capacidades que tienen los jóvenes.

Todo individuo tiene derecho a una educación de calidad, y es obligación del Estado el otorgársela. La promoción de valores, la igualdad de oportunidades, la solidaridad intelectual y moral, son solo los primeros pasos que dar para poder asegurar oportunidades de aprendizaje permanente y estable en el país. Todas las personas deberían de tener las mismas oportunidades de acceder a una educación de calidad y que el hecho de escoger entre un establecimiento educativo público o privado no sea asunto de privilegio, sino de preferencia de la persona.

Abog. María Fernanda Reina Asociación de Estudiantes de Relaciones Internacionales
Comité Editorial “La Voz de la Academia”.

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