Infraestructura resiliente ante desastres
Por Álvaro Sarmiento
Especialista Internacional
en Comercio y Aduanas
Recientemente se celebró el tercer aniversario de la entrada en vigor del Acuerdo sobre Facilitación del Comercio de la Organización Mundial del Comercio (AFC/OMC), el principal y posiblemente único acuerdo comercial multilateral en los últimos diez años.
Tanto el empresariado como el gobierno central, hacen continua referencia a convertir al país en un centro logístico de nivel mundial, y muestran la infraestructura cada vez más pujante de Puerto Cortés. Asimismo, la fuerte inversión vial en el país para modernizar todas nuestras carreteras es un gran esfuerzo que mejorará la conexión de los centros de producción, consumo y exportación, reduciendo tiempos y costos. La reciente finalización del tramo carretero entre la frontera de El Amatillo con Comayagua, el “Corredor Seco” con financiamiento del BCIE, significa ahorro sustancial -mas de 100 kilómetros- y mejora en la competitividad.
Pero recordemos que el Canal Seco, tiene extremos, por donde se entra y se sale. El extremo sur, es claramente el Amatillo y el norte Puerto Cortés, los laterales, las fronteras de Corinto, El Poy, Agua Caliente y El Florido. Modernizar y agilizar ese paso fronterizo, es materia obligada.
La velocidad del comercio internacional, si pretendemos poseer un centro logístico internacional, donde se pueden conectar ambos océanos, o servir a exportadores e importadores salvadoreños, nicaragüenses, y guatemaltecos, requiere en buena medida cumplir con los compromisos adquiridos en el AFC/OMC.
En el sitio de la OMC, se pueden encontrar el nivel de cumplimiento de compromisos por país, en el caso de Honduras es el 54%, comparado con los vecinos; Guatemala 74%, El Salvador 77%, Nicaragua 81%, Costa Rica 98%, Panamá 83%. Tenemos mucho espacio y poco tiempo para mejorar. Los compromisos tienen que ver con publicación (transparencia), consultas, resoluciones anticipadas, procedimientos de revisión, notificaciones de controles, retenciones, pagos electrónicos, gestión de riesgo, operadores autorizados, mercancías perecederas, ventanillas únicas, cooperación aduanera, etc.
En febrero del 2018, el gobierno hondureño notificó a la OMC, compromisos que en la mayoría deben cumplirse entre marzo del 2022 y el 2026. Muchos dependen de apoyo financiero y asistencia técnica en la modificación o adecuación de normas nacionales, software, creación de capacidades y recurso humano cualificado.
En buena medida, mucho se puede hacer y adelantar, con el apoyo técnico que ya vienen brindando -entre otras- dos instituciones internacionales con presencia continua en Honduras, en la parte tributaria (SAR y Administración de Aduanas Hondureña) los programas de @CAPTACDR del FMI han sido fundamentales en la gestión eficiente y estratégica de la aduana, así como en el desarrollo del tema de Gestión de Riesgo, uno de los puntos más fuertes de ese programa.
Por otro lado, el Grupo del Banco Mundial (WBG) se encuentra desarrollando una segunda fase del “Proyecto Regional para Apoyar la Implementación del AFC/OMC”. En la primera fase, los gobiernos de Honduras y Guatemala fueron beneficiados con el apoyo para montar el plan piloto que posibilitó la implem
entación de la FYDUCA y la reducción de 10 horas a 15 minutos en los pasos fronterizos entre ambos países.
Parece que el reto es aprovechar con eficiencia esta asistencia técnica, priorizándola y contribuyendo con la contraparte humana y material necesaria.
