Unos al hoyo y otros al cogollo

MA
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26 de mayo de 2020
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12:12 am
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Unos al hoyo y otros al cogollo

Boris Zelaya Rubí

El refrán popular se refiere a que cuando alguien muere, los allegados al fallecido, por mucho pesar que sientan, han de atender sus asuntos y necesidades, entre ellas una muy básica como su manutención. Se aplica también este refrán para recriminar al que se olvida demasiado pronto del muerto.

La política como un fenómeno social, algunas veces hace resaltar lo más innoble que un ser humano puede tener en el corazón, con los contrarios a su partido político, formando coaliciones que están resueltas a lograr parte del botín al llegar a la máxima posición que les permita hacer maniobras personales con el tesoro nacional.

En la ambición tempranera, aun con la pandemia que nos invade, van “unos al hoyo y otros al cogollo”. Tiene a los ya pasados de años (preferidos del COVID-19) exponiendo sus vidas, por cierto, no en contacto con sus ahora parciales. Están hambrientos de poder y usan como excusa, la posibilidad de que el “hombrón de Lempira” desee quedarse un tiempo más para sanear la nación, tanto en lo que atañe a la salud como a lo económico. Son capaces de hacer alianzas, valiéndose del “prestigio” o de la figura de políticos que ya moran en la eternidad, así como muchos de sus seguidores. No hay duda que “el alero” les gana con su “puchito” de simpatizantes en dos patadas, pues se ganó los votos de abrazo en abrazo.

Ahora con la existencia de las redes “contaminando a los jóvenes”, la presencia de cualquier alimaña ambiciosa será sencilla. No olvidemos que los “rucos” con el ala matan y son capaces de comerle el mandado a cualquier bien intencionado aspirante.

Algunos jóvenes amenazan con organizar sus propios movimientos que con solo una “hambreada” de cinco días, consideran que esa “proeza” los faculta para exigir la aspiración a la Presidencia de la República. Otros están esperando que les rueguen para lanzarse (a saber de dónde) después de liderar un gremio de profesionales y estar en contra del gobierno (hasta por las goteras).

Afortunadamente para los “líderes ancianos”, con su experiencia, les será fácil comprar votos, pues los que han sobrevivido al “pinche virus” como le dice mi estrella Dani, van a estar con la mano extendida y ellos, los voraces políticos, comprarán su decisión en las urnas por cuatro centavos, y los muertos (con perdón de los deudos) de repente votan, para eso tienen a la súper transparente Ricci, y el dinero siempre vendrá del exterior a borbollones como contribución entre los de igual ideología.(Esta vez no lo dejarán botado).

Algunos de los famosos (por mostrar sus rostros atacando al gobierno) ya nos tienen hartos. Desde lejos se les nota que su deseo es continuar en sus curules, pues el salario es excelente y de repente venden sus votos y se pueden convertir en millonarios, muriendo como “héroes” representantes del pueblo, perdón, quisimos decir de sus familias.

Podría milagrosamente surgir un buen candidato, pero con las alianzas correrá el peligro de embarrarse los zapatos con la podredumbre de las malas acciones que han realizado, durante sus vergonzosas trayectorias, los que desean aprovecharse de su imagen, y no será suficiente los pediluvios de moda para limpiarse esa porquería.

El pueblo hondureño desde ahora sabrá quiénes quieren capitalizar sus lágrimas y dolor, ante aquellos que saben cómo utilizar estratégicamente cualquier pandemia para su beneficio político, ¡raza de sátrapas!

De rodillas solo para orar a Dios.

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