El Partido Liberal y una renovación para sobrevivir

MA
/
27 de mayo de 2020
/
12:29 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
El Partido Liberal y una renovación para sobrevivir

Cultivos que trascienden las fronteras hondureñas

CARLOS MEDRANO
PERIODISTA
[email protected]

Luego que el Partido Nacional demolió, manipuló, dividió y golpeó a muerte a su tradicional rival político, el Partido Liberal hoy más que nunca requiere de una renovación de sus cuadros que le permita competir con dignidad en las próximas elecciones generales, si es que las hay.

El Partido Nacional fue desleal con su compinche cogobernante, ya que en el momento cúspide del golpe de Estado en contra del presidente liberal en ese entonces, “Mel” Zelaya Rosales y la pelea interna que sostuvo contra Micheletti Bain, los de la estrella solitaria atizaron el pleito, motivaron la lucha y se prestaron vilmente a la explosión autodestructora del partido rojo blanco y rojo.

Casi la mitad del Partido Liberal se fue para Libre, mientras el actual liderazgo ha sido incapaz de unir a esa institución, coincidir en los puntos que los unen, aceptar humildemente la diversidad de opiniones e intereses y retornar al poder amalgamando a sus simpatizantes, como lo hicieron en el pasado.

Los resultados de la última votación, es el reflejo inequívoco de un partido moribundo, fraccionado al extremo y sin la capacidad de liderazgo que se requiere después de tener semejante golpe en su estructura e ideología política.

Luis Zelaya está enfrentado abiertamente a su bancada en el Congreso Nacional, la bancada liberal no escucha a sus líderes del Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal (CCEPL), la mayoría de los diputados liberales pareciera que obedecen las órdenes emanadas por los cachurecos, que siguen desgarrando a sus “compañeros” cogobernantes hasta minimizarlos en todas las decisiones de país.

Frente a este panorama en el que hoy lo tiene como tercera fuerza electoral, muchos han pronosticado que la suerte del Partido Liberal está echada, que su única opción de retornar al poder es encabezando una alianza política de oposición que expulse del poder al Partido Nacional.

Dicha oposición política es actualmente la única alternativa para sacar a los cachurecos del Poder Ejecutivo y mientras sigan divididos, Libre, Partido Liberal y Nasralla, tendremos a los azules para muchos años más en el gobierno.

Otros creen que debe haber una renovación de sus cuadros y cambios generacionales que permitan refrescar la imagen de esta legendaria institución política que forma parte de la historia y del ajedrez electoral tradicional en el país.

Por ahí se menciona a la doctora Suyapa Figueroa, actual presidente del Colegio Médico de Honduras como una posible candidata, que, aunque no es una política de profesión, nos parece una excelente opción que vendría a darle un giro a este agonizante partido.

La doctora Figueroa tiene buena imagen, ha demostrado ser una mujer con valentía, integridad y de convicción, pero muy inexperta y algunas veces radical en su actuar público.

Se menciona también al expresidente de la Comisión de Banca y Seguros, José Luis Moncada, un experto en números, pero sin carisma para unir a los liberales.

El centenario Partido Liberal de Honduras, el partido de las milicias eternamente jóvenes, el partido del confalón rojo, blanco y rojo, necesita salir de cuidados intensivos e inyectarle un cambio radical que transforme la política tradicional en el país y nos lleve a un mejor destino.

Más de Columnistas
Lo Más Visto